Pero Johnny And Mary creo que por justicia poética debería ser la más recordada del fallecido y no muy referenciado artista, ya que tiene una evocadora magia durante todo el transcurso de la canción, que sumado a la nostalgia de formar desde siempre parte de tu imaginario, la convierte en algo muy bello.
Esos sintes tan sutíles que van sonando toda la canción, hacen que la emparente con los de Close To Me de The Cure, ya que en ambas parece que no estén y ntender son los que les dan el punto de diferencia, además de hacerlas de lleno producto ochentero por excelencia.
Hace poquitos años, los británicos Placebo tuvieron a bien adaptarla a su terreno y me atreviría que superaron a la original, dándole una fuerza y una rabia inusitada que creo que fortalece a este temazo (pulsa AQUÍ para escucharla). Aunque mejor no escoger pudiendo quedarse con las dos, ¿no?.