clásicos, novelas gráficas, premios Nobel… un mes variado y de calidad

Publicado el 08 agosto 2014 por Mineapolis @nov_historias

El Diablo a Todas Horas

La primera lectura del mes me decepcionó ligeramente. Esta novela es una colección de personajes interesantes pero perdidos en una historia que puede resultar algo descafeinada. El problema no es que no sea interesante, sino que muchas veces no interesa, por eso tardé varios días en leer las últimas páginas. Aún así, que nadie dude que es una buena lectura, sobretodo si queréis algo sencillo y entretenido. Gran parte de los problemas que le veo son a causa de las expectativas, que siempre andan jodiendo. Recomiendo no dejarse llevar por el hype y leerlo sin esperar más que entretenimiento y mala leche.

El Mundo de Sofía

Empecé el libro con los reparos de alguien que teme encontrarse una especie de Amélie en clave filosófica pero por suerte estaba equivocado. Gaarder no esconde la naturaleza didáctica de la obra en ningún momento y por eso no se la puede juzgar como a cualquier otra novela. Básicamente, como sabréis, trata de una chica que empieza a recibir por correo unas preguntas y un curso acelerado de filosofía. Esta es la excusa para hacer un repaso comprensible y ameno a gran parte de la historia de la filosofía. Al principio puede resultar algo molesto leer diálogos tan construidos con el único propósito de servir a la explicación, pero más adelante, cuando el libro empieza a convertirse en una especie de matrioska se comprende el motivo. Es en esta parte final cuando se alarga un poco y pierde parte del encanto. En todo caso, es un gran libro para refrescar a los grandes filósofos de una manera entretenida. Creo que tendría que ser una lectura obligatoria en los institutos.

 El Amor en los Tiempos del Cólera

¿Qué se puede decir de esta obra que no se haya dicho ya? Estuve un tiempo pensando si escribir una reseña o no. La dejé a medias porque no podría hacerle justicia al libro y además, a estas alturas, tampoco se lo iba a descubrir a nadie. Foster Wallace decía que cuando leía una buena obra podía oír los clicks en su cabeza, como iba encajando todo el engranaje que hace a una novela grande. En este libro es constante, la increible prosa de Gabo fluye literalmente desde la primera palabra hasta la última, impidiendo que abandones la lectura. Aunque la historia es muy emotiva, lo cierto es que leía por el puro placer de las palabras; por el placer de leer, en definitiva. Por primera vez he sentido la necesidad de leerme en voz alta para escuchar como sonaba. Las descripciones son tan bellas, tan vivas que realmente el tópico de que la literatura te transporta a otro lugar se hace realidad. Es una obra viva, gráfica, sofocante, colorida. Hace más de dos años que tenía el libro en la estantería y me alegro de haberme puesto con él finalmente, a pesar de la pereza que me daba al principio. El calor que pega por aquí estas fechas ayuda a entrar en situación.

El Misterio de la Cripta Embrujada

De no ser por el Summerthon no me habría ni planteado leer este libro. De hecho quizás no me habría planteado leer nada de un autor español. Lo sé, planeo cambiar esto para el año que viene. En todo caso, lo escogí porque sucede en Barcelona y el misterio que prometía la sinopsis me parecía… pues eso, misterioso. Vaya por delante que lo he disfrutado. Es corto, entretenido y tiene alguna que otra situación cómica (que no graciosa) pero… pero muchas cosas. El mayor problema que he tenido con él es la manera en que está escrito. Todos los personajes, da igual que sea el protagonista con problemas mentales o un policía de poca monta, TODOS tienen son increíblemente locuaces. Hablan de una manera que llega a cargar, mucho. Creo que nunca he leído con semejante cantidad de frases interminables en un libro. Aquí va un ejemplo, en boca de una monja de orígenes humildes. Son dos frases. Sí, ¡sólo dos!: “Ah sí, en efezto, en la mañana del segundo día, y no sin que la noche anterior la comunidad hubiera impetrado un milagro de la virgen del Carmen, cuyos escapularios bendecidos, por cierto, llevo en el bolso, por si los desean comprar, las alumnas advirtieron con extrema sorpresa que su compañera desaparecida ocupaba nuevamente la cama que le correspondía, que se levantaba con las demás y procedía, junto con ellas, a la diaria toilette, formando una vez vestida filas en la recámara de la capilla como si nada anómalo hubiera pasado. Las compañeras, por respeto a las instrucciones impartidas, guardaron absoluto silencio, pero no así la persona encargada de verificar que todas las alumnas se habían levantado, aseado, peinado, vestido y aprestado a asistir al santo sacrificio de la misa, o, si ustedes prefieren, la celadora, que así se denominan a quien se ocupa de lo antes enumerado, que, agarrando de la mano, o quizá de la oreja, a la reaparecida corrió al despacho de la superiora, gran persona, quien tampoco pudo dar crédito a sus ojos ni oídos“. No me digáis que al autor no se le ve el plumero. Muchas veces más que gracioso da la sensación de que se pasa de listo. Si os carga, pasad de él. Aún así, y a pesar de que la resolución del libro es un tanto sosa, creo que podría recomendarlo, siempre y cuando sepan de este estilo tan particular.

El Jugador

A principios de este año dejé a medias la relectura de Crimen y Castigo. A pesar de que me estaba gustando, simplemente lo dejé aparcado. Con este quería volver a leer algo de Dostoievski nuevo pero no demasiado extenso. Es difícil empezar un libro de este autor y no sentir algo de desesperación. Te suelta en medio de la historia, sin explicar apenas quienes son los personajes o darte algo a lo que agarrarte. No obstante, una vez entras en la historia todo se vuelve mucho más fácil. Aunque sin llegar a los niveles de Rodia, el protagonista y demás personajes que pueblan El Jugador también son vanidosos, desquiciados e imperfectos. Esta es la grandeza del Dostoievski, describe una sociedad llena de bajezas morales sin juzgarla. Si algo me ha faltado es que divagase más y no se centrara tanto en la historia.

Timbuktu

 Igual que el anterior, este es otro libro que devoré en apenas dos días. No tenía claro de qué iba cuando lo empecé y pronto me sorprendió la original propuesta de Auster. La novela está centrada en Mr. Bones, el perro de un poeta bala perdida que decide ir en busca de una antigua profesora del colegio. Este es el punto de partida de las desventuras del perro, a quien leemos (literalmente) el pensamiento. La sensibilidad que demuestra y su comprensión del mundo y el comportamiento humano es bella y dolorosa al mismo tiempo. Se pasa de la sonrisa a las lágrimas sucesivamente hasta desembocar en un final desgarrador que a mi me dejó echo polvo un buen rato. Auster es un grande y sabe cómo emocionar sin caer en el sentimentalismo. Una obra sencilla pero realmente preciosa. Si tuviera que recomendar un libro de esta lista a alguien que no conociera de nada sería este, sin duda.

La Playa

Sencillo, fresco y adictivo. Es un libro sin complejos sobre un grupo de viajeros en Tailandia que van en busca de una isla (y su playa) alejada de toda masificación, un paraíso reservado a muy pocos al que llegan tras recibir el mapa de un suicida. Como sabrá todo aquel que haya visto la película del siempre solvente aunque no siempre genial Danny Boyle, en esa isla descubrirán un grupo de personas que viven alejadas del mundo exterior. Es una pequeña y estanca comunidad donde colabora todo el mundo para permitir un modo de vida sencillo y relajado. Las mejores páginas son las que describen este modo de vida en apariencia perfecto, antes de que todo se vaya al garete, como siempre pasa. El libro se divide en diez partes, y estas a su vez en capítulos muy cortos de apenas 4 o 5 páginas. Esto ayuda a agilizar mucho la lectura, y evita que cierres el libro (consigue el típico “un capítulo más y ya”). Decía que es un libro sin complejos porque sabe lo que es, un pasatiempo de calidad, y no tiene aires de grandeza. Cumple su función perfectamente y por eso creo que es muy  recomendable, sobretodo para el verano. Esas descripciones de la playa, con sus esporádicas tormentas veraniegas, son increíblemente refrescantes.

Monstruos

 Una advertencia antes de nada: ¡ABSTENERSE HIPOCONDRÍACOS! Esta obra me ha sorprendido a muchos niveles. No suelo leer novelas gráficas y por lo tanto, no estoy acostumbrado a sus recursos, quizás por eso me haya sorprendido tanto. Creado por Gabby Shulz bajo el seudónimo de Ken Dahl, Monstruos trata de un hombre que descubre que tiene herpes y, además, le contagia la enfermedad a su novia. Poco a poco el problema empieza a crecer y le va consumiendo, destrozándole la vida, que se verá reducida a su enfermedad. Los recursos gráficos que utiliza son increíblemente acertados y realmente ayudan a sentir el pesar por el que atraviesa Ken. Sin ser una obra didáctica, se descubren muchas cosas acerca del jodido herpes. De hecho da algunos datos un tanto alarmantes que no serán del agrado de muchos. Para todos aquellos excesivamente preocupados por estos problemas hay un final que le quita hierro al asunto. Aún así yo, que no soy hipocondríaco, me volví un poco paranoico (solo por unas horas).

Y hasta aquí mi extenso resumen de un mes bastante prolífico en cuanto a (buenas) lecturas! Aprovecho y dejo una foto para ver el estado de mi #summethon!