Cleaning out...

Por Yopo
Estoy de limpieza general. Limpiando mi vida. Porque no sólo tocaba colocar armarios, habitaciones, tirar ropa apolillada, o cambiar el orden de los libros en las estanterías. Ésta es una limpieza más a fondo, una limpieza interior y exterior, desde las entrañas hasta el dedo gordo del pie. La necesitaba.
Hace unos días que he terminado los exámenes, y de nuevo hoy volvemos a la rutina con dos semanas de laboratorio intensivo cada tarde. Tenía que ponerme las pilas en pocos días, y para ello no he encontrado mejor forma que soltar lastre. Tirar a la basura muchas de las cosas que he ido recogiendo sin sentido durante los últimos meses. Ésas que recopilaba con la esperanza de que sirvieran para algo en un futuro... pero a día de hoy, me parece que no. Por eso no hay mejor forma de comenzar una nueva etapa que eliminar ese polvo que se ha ido acumulando sobre mí, y que no me dejaba ver con claridad. Limpiar cada rinconcito de mi ser de esa suciedad que me había ido oscureciendo últimamente.
Estaba rodeado de basura, sin quererlo me había convertido en un Diógenes de libro, me rodeaba de oportunidades, de recuerdos, de momentos... sin darme cuenta que olían mal, y que por mucho que hiciera no dejarían nunca de ser escombros de mi vida.
De modo que no me ha quedado más remedio, y además de hacer limpieza literal, y redecorar un poco mi mundo, he tenido que armarme de valor y hacer limpieza mental y emocional. El viaje de mi vida está muy cerca, y no puedo permitirme ir cargado de trastos en la maleta que ya no voy a necesitar. Nunca.
Voy a sacar la basura...