Prisionero de sus errores , Zapatero habla del tiempo con con
su ama de llaves en un clima de tensión:
- Nunca debí confundir una borrasca pasajera con un vendaval.
Me equivoqué al predecir que el vendaval no alcanzaría la
dimensión de un sunami. Pero ¿como podía imaginar que el
sunami era en realidad la cuarta glaciación?
- Malos tiempos para el optimismo, Jose Luis.