De nuevo gozosamente los protagonistas de los clubes de lectura malagueños en esta recién estrenada primavera son los clásicos, entre ellos una de mis novelas favoritas: La Taberna, de Emile Zola. La situación actual hace que las posibilidades de adquirir libros a precios más que razonables se multiplique: cada vez hay más establecimientos de segunda mano y rastros, algunas veces con ejemplares más que interesantes y, además, existe la posibilidad de adquirir libros de manera gratuita (ya hablaré un poco más suscintamente de esto) colaborando además en una buena causa.
En el club de lectura de la Biblioteca Provincial, una estupenda novela corta que acabo de leer hoy mismo: Diario de un hombre superfluo, del ruso Turguénev.
En el club de lectura de la Biblioteca Cristóbal Cuevas, la ya nombrada, La Taberna, de Emile Zola. Absolutamente recomendable para quien todavía no se haya acercado a ella.
En el club de lectura de la Casa del Libro, sesión doble. Por un lado, un siempre placentero regreso a Stefan Zweig, con su narración breve ¿Fue él? y por otro, una novela policiaca de un autor español: Ojos de agua, de Domingo Villar.
En el club de lectura de la Fnac Málaga, una novela que protagoniza la mismísima reina de Inglaterra: Una lectora poco común, de Alan Bennett.
En el club de lectura de la Librería Luces, un autor de terror que yo desconocía hasta este momento, pero que se presume interesante: ¿La dama o el tigre?, de Frank Stockton.
Y en el ciclo Literatura y cine, del que soy responsable, un pequeño homenaje al ganador del Oscar de este año: Adiós, pequeña, adiós, de Ben Affleck.
Como es habitual, si hay novedades, las tendrán puntualmente en la columna de la derecha. ¡Felices lecturas!