CO2 provoca cambios en las dunas de arena de Marte

Por Quantum-Rd @Quamtum


El dióxido de carbono helado es uno de los elementos que hace que las dunas de arena del polo norte de Marte se muevan, según sugiere un estudio del Instituto de Ciencia Planetaria en Tucson (Estados Unidos) que se publica en la revista 'Science'.
Aunque las dunas de arena cerca del Polo Norte Marciano parecieran relativamente estables a lo largo de los años, por lo que algunos investigadores han incluso propuesto que son reliquias endurecidas de un pasado antiguo, nuevas imágenes de satélite muestran cambios estacionales claros y un transporte activo de arena en estas dunas. Se trata de uno de los paisajes más activos de Marte.
Candice Hansen, directora del Laboratorio Lunar y Planetario de la Universidad de Arizona, quien dirigió al grupo de investigadores que se encargaron de analizar las imágenes de la cámara de la sonda durante cuatro años, señaló que “La cantidad y la magnitud de los cambios han sido realmente sorprendentes”. En su estudio, el equipo de Hansen, analizó imágenes del Experimento de Ciencia de Imágenes de Alta Resolución (HiRISE) que se encuentra en la sonda espacial Mars Reconnaissance, que ha estado registrando la actividad estacional de Marte durante dos años (equivalentes a cuatro años de la Tierra).

Las dunas de arena del polo norte de Marte se mueven.
Los científicos explican que se han producido cambios en la arena en un 40% de las zonas septentrionales del planeta rojo en que han centrado sus estudios. Los investigadores señalan que los cambios en las dunas de arena marcianas han sido causados principalmente por la arena y el hielo que corre hacia abajo en las superficies inclinadas de las dunas. Pero, de forma adicional, los autores sugieren que las dunas del Polo Norte de Marte están sujetas a otros procesos que no se dan en la Tierra: la sublimación del dióxido de carbono en los casquetes polares cada primavera marciana.
Según señalan los científicos, esta helada estacional del dióxido de carbono podría iniciar el transporte de arena de las dunas del norte de Marte. “Este flujo de gas desestabiliza las dunas de Marte, causando avalanchas de arena y la creación de nuevos nichos, barrancos y rampas de arena”, explicó. Dicho gas en invierno se congela y en primavera vuelve a estar en estado gaseoso. El efecto del hielo seco en primavera se había observado ya en la región polar meridional de Marte, que ahora se descubre también en el Norte; además, se aprecia la formación de gargantas asociadas directamente con el CO2.
“El nivel de erosión en sólo un año de Marte fue realmente sorprendente. En algunos lugares se desprendieron por una de las caras de la duna cientos de metros cúbicos de arena como un alud”, señaló. El equipo también descubrió que las “cicatrices” que dejan las avalanchas de arena pueden ser borradas parcialmente en tan sólo un año marciano, que equivale a 687 días en la Tierra.
Fuente: Europa Press

El nivel de erosión en sólo un año de Marte fue realmente sorprendente. En algunos lugares se desprendieron por una de las caras de la duna cientos de metros cúbicos de arena como un alud.
Quantum opina:
La sonda espacial Mars Reconnaissance Orbiter (MRO) fue enviada al planeta Rojo el 12 de agosto de 2005 y entró en la órbita marciana el 10 de marzo de 2006; cuenta con una antena que tiene tres metros de diámetro con la capacidad de transmitir 6 megabits por segundo, así como cámaras de alta definición con capacidad suficiente como para captar con claridad objetos del tamaño de un escritorio.
En 2008 completó la primera fase de exploración científica y continuó luego las investigaciones de la superficie y de la atmósfera del planeta. Además del descubrimiento de grandes masas de agua en las latitudes medias del planeta, el MRO determinó que el agua esculpió la superficie de Marte hace millones de años y determinó que en su superficie existieron diversos ambientes hidrográficos, algunos ácidos y otros alcalinos.
Las dunas que rodean el casquete polar Norte fueron fotografiadas por la nave Mariner 9, también de la NASA, a principios de los años setenta del pasado siglo, pero se había considerado que serían estables, con una costra firme en la superficie.