Estoy viendo un programa sobre Silicon Valley, el lugar con los mejores cerebros del mundo.
Dedicados a trabajar la mayor parte de su tiempo, cuando llegan a una edad determinada muchos de ellos son asistidos por un coach para enseñarles a relacionarse, vestirse y encontrar pareja... Les ayudan a sentir, porque de pensar están sobrados :-)
Es curioso, porque por aquí estamos acostumbrados a solicitar servicios de coaching para prosperar en el campo laboral. De relacionarnos y divertirnos... estamos entrenados. Es, prácticamente, el mismo proceso a la inversa.
Algunos de los "cerebros" entrevistados respondían que, para el desarrollo de sus proyectos, no les movía el dinero sino las ganas de cambiar el mundo. En el fondo, tienen conectada la mente al corazón.
La lectura que extraigo es que, en realidad, todos somos iguales.