Siento que hay alguien que me exige que vaya, no me puedo negar, en silencio muestra cada detalle para que lo siga haciendo. Desde aquella matanza de la comuna de San Joaquín, solo quiero alejarme de este medio, y ahora mas encima hoy el patudo alcalde que asesinó a cientos de perros inocentes salió reelegido, que caradura. ¿No se que tienen las personas en su cabeza? Uno les trata de mostrar que están equivocados, que existen maneras de rechazar este tipo de situaciones, y zas, que vuelven a caer en lo mismo. Sigue existiendo mas cantidad de personas que no están ni ahi con los animales, personas que se venden por dinero con tal de tratar de mejorar su vida sin importarle para nada que los perros abandonados sufran o no.Total, a ellos se les paga para que lo hagan. A mi no.
La verdad que han existido veces que las ganas de cerrar todo y alejarme de internet de manera muda, no me han faltado, ya lo he intentado, pero siempre hay algo que me hace volver, como hoy.
La tarde está exquisita, el aire corre liviano como brisa otoñal, no hace frío, el camino está expédito, salen a mi encuentro tres perras. Continuamos subiendo, deteniéndome en cada parada, o en cada punto donde hay huéspedes escondidos tras los matorrales esperándome. Hecho de menos perros recien llegados, tendré que esperar aproximadamente dos semanas si es que los vuelvo a ver, de lo contrario, pensaré que empezaron a correr, lograron salir del camino, o sino, se fueron a morir de pena arriba de los cerros. De repente el aire trae olor a perro muerto. No puedo imaginar a quién le tocó morir. ¿Cómo saberlo?
Por suerte alguien subió con alimento, no conocía el camino, y en algunos lugares aun queda pan duro. El poco alimento que les llevo la verdad que hay que cuidarlo para que alcance para todos en lo posible, asi disminuyo la cantidad cuando otra persona bondadosa se ha acordado que en ese camino hay perros tristemente abandonados. Me encuentro con un matrimonio que nos saluda de manera cordial, me dice que ellos también les habían llevado alimento, como nos habían visto la vez anterior haciéndolo, ellos se acordaron de nosotros y les llevaron algo aunque fuese. Me dió una alegría enorme que nos hubieran imitado y acordado de los abandonados. Conversamos un rato y seguimos. El día estuvo caluroso, no hay nada de agua en los posillos. Ellos se tiran de manera desesperada al ver que lleno sus potes. Lo que mas falta les hace en esta época es el agua en algunos sectores donde el río está demasiado abajo para que les quede a su alcance.
Me nutro de todo lo verde, voy de copiloto, cuando de repente mirando hacia adelante, al lado derecho de la calzada, sobre la nada berma, me encuentro con esto. Saquen sus conclusiones y atrevete a dejar un comentario en bien de ellos, los perros abandonados.
¿Que les parece?
De lejos observo que es una bolsa blanca, con algo negro, no se mueve, imagino que es un perro muerto, que alguien lo fue a botar después de que murió. Me bajo con temor, con ese temor que recorre el cuerpo ante lo desconocido, es fuerte, pero la vida me ha dado la suficiente fortaleza para saber enfrentar cada momento difícil. Al acercarme siento que gime, huacala, dentro de esa bolsa blanca, tipo nylon plástico, hay un perro vivo, solo le dejaron su cabecita fuera. La impotencia empieza apoderarse de mi, trato de no pensar en ese personaje que abandonó a su mascota con alevosía, se dió el trabajo de meterlo dentro del saco y amarrarlo tan firme para que no pudiera escapar después de tirarlo de su auto en movimiento, y así evitar que lo siguiera. No pensó que al dejarlo amarrado, ese perro no tendría ninguna ventaja ante algún ataque de perro dominante, o jaurías que lo pudieran atacar hasta matarlo, o ¿que un auto le pasara por su cabecita a la orilla del camino?.Al ver que me acerco, el pobre animal empieza a revolcarse en la tierra para intentar escapar. Trato de hablar lo mas suave para poder darle confianza con mi voz, me mira y sigue saltando queriendo escapar, pero no puede, imposible, tiene todo su cuerpo inmóvil, sus patas encogidas se retuercen dentro de ese saco.
La miseria humana no tiene límites.
Voy al auto, saco alimento y agua, lo incentivo a tratar de comer y beber, pero no quiere, intento tranquilazarlo, de a poco se va a dejando. Acerco mi mano para hacerle cariño y me encuentro con una cabeza repleta de garrapatas hembras, enormes, dentro de sus orejitas, alrededor de sus ojos, en su cuello, otra vez impotencia. Respira profundo Marce. Lo primero que hago de manera casi desesperada es sacar los enorme parásitos que están por entrar al ojo. El perro intenta tirarme mordiscos, pero el cansancio lo consume y se entrega. Entonces me voy a su cuello, y vean con lo que me encuentro, un alambre grueso que da vueltas alrededor a su cabeza, imposible sacárselo a la primera, de lo contrario le haría mas daño.Fíjense en el tipo de alambre.
Se acuerdan de ese comercial sobre la campaña del Sernam contra la violencia intrafamiliar donde Jordi Castell decía que maricón es el que le pega a una mujer, pues bien, esto queda como prueba, que maricón también es el que comete abandono, abandona a su mascota en las peores condiciones. Hace clic aquí o sobre la frase siguiente, y veras que no miento. Asi botan los perros en los cerros.Maricón es el que abandona una mascota.
Creo en Dios, y confio que tarde o temprano ese personaje tendrá que darle cuentas a El o al universo, ya ni siquiera maldigo a quienes de manera maléfica, van a botar a sus queridas e inocentes mascotas, no importa el lugar, importa el abandono, la manera en que el mejor amigo del hombre, es traicionad. Confío en que hay una justicia divina, y que esa justicia divina tarde o temprano se la cobrará. Todo lo malo y bueno que hacemos, siempre se devuelve.
Solo hay que esperar...yo se esperar.
NO MAS ABANDONO DE PERROS
Marcela Opazo
losperrosdelcamino@gmail.comLos perros del camino?... son todos aquellos que de una u otra manera estando perdidos o abandonados, Dios los pone en mi camino cuando paso...y algo me dice: tienes que detenerte, no puedes seguir...