Coburn - Pablo García Naranjo

Publicado el 16 octubre 2015 por Elpajaroverde
Mirad la portada bajo estas líneas. Huele a vieja novela del oeste. A plomo, a sangre, a sudor añejo. A tipos duros de gatillo rápido. A tipos más duros, más sabios y cautos. Huele a cine, de acción y tiros. Huele a la esencia que esconden sus páginas. Porque sí, este libro es como un western moderno. Este libro es como una película de acción y tiros, pero eso sí, de las buenas.

Portada de Coburn

El protagonista de "Coburn", cuyo nombre da título a esta novela, es un matón, un sicario, un asesino a sueldo. Es un perro viejo, viejo y cansado. A sus cincuenta años lleva muchos muertos a sus espaldas, muchos encargos cumplidos, muchos no querer saber y coger la pasta. Coburn conoce el oficio, sabe esperar el momento, sabe ser cauto, sabe no dejar cabos sueltos. Sabe también que no sólo los muertos pesan, los años también. En su profesión no está permitido bajar la guardia y el más lento siempre resulta muerto. Hay que tenerlo todo bajo control, no dejar hueco a que surjan imprevistos, pero eso no siempre es posible. Su más reciente trabajo se complica en el último momento, cuando ya está acariciando el cobro y por qué no, el sueño de una pronta retirada. Coburn tendrá que huir, como ha hecho tantas otras veces en el pasado, dejar la insomne Nueva York para recalar en la no menos peligrosa Los Ángeles. Coburn no viaja solo, le acompañan una bolsa con dinero y una promesa por cumplir. Y Coburn cumplirá, cueste lo que cueste, ese es su trabajo, eso es lo que siempre ha hecho, lo único que sabe hacer. Coburn siempre cumple.
"Mi trabajo es asegurarse de que no quede ninguna prueba de lo que ha pasado. Nada se habrá roto. Nada se habrá perturbado. No existirán las repercusiones de tu imprudencia. No se romperá la confianza ganada a través de los años."
A mí esta portada, qué queréis que os diga... la hubiera visto pero no la hubiera mirado. Es más, la hubiera olvidado al instante junto con su título. En el improbable caso de que me hubiese animado a leer su sinopsis ni siquiera habría terminado de hacerlo, y eso que es breve, pero no hay nada en ella que me diga 'léeme'. Y que no se ofenda nadie que no es problema ni de la portada ni del título ni de la sinopsis, el problema, si alguien lo tiene, lo tengo yo. A mí esta portada me huele a libro que no me apetece leer, no soy yo muy de tiros ni de matones. ¿Y por qué lo he leído, entonces? Pues porque es uno de los libros nominados al Premio Guillermo Baskerville organizado por la web literaria Libros Prohibidos. Así que toca fiarme de la opinión de Libros prohibidos y leer.
Y leo. Y me encuentro cómoda ya desde el principio, ubicada, como se está en los libros que con escasas frases saben centrarte y llevarte a su terreno. Porque la ambientación de esta novela es muy buena, y en seguida te sientes ahí, arropada con tu mantita en el sofá y con los ojos fijos en la pantalla. Y así sigues hasta el final, porque el inicio no es solo promesa sino que se convierte en hecho. La novela cumple su cometido, al igual que lo hace el viejo Coburn.

Money, Money, Money. Fotografía de Daniel Borman

Pablo García Naranjo es un narrador solvente. Su prosa es sobria como lo son sus personajes, apenas esbozados, justos y medidos pero cumpliendo su papel. Narración de acción y hechos salpicada de diálogos escuetos que funcionan a la perfección. García Naranjo recurre a todos los elementos del género: tipos duros, dinero fácil, ajustes de cuentas, venganza, ambición,... Añadiría sexo, droga y rock & roll, si no fuera porque los dos primeros están presentes pero sin abusar de ellos y porque el ritmo en este libro no lo marca la música sino el silbido de las balas. Silbido que apenas se oye pero que indica una dirección, la dirección en la que va esta historia.
Esta historia es como un revólver que se dispara, en el momento en el que se aprieta el gatillo ya no hay marcha atrás. Certera, precisa, salvando todo obstáculo que se presente en su camino y haciendo diana justo donde se quiere dar. El autor nos cuenta una historia mil veces contada pero sin que por ello sepamos lo que va a pasar ni se deje de disfrutar.
Los que pasáis por aquí con frecuencia supongo que ya intuís por donde me ganan y me tocan los libros. Este que os traigo hoy no me ha tocado pero sí me ha ganado. Le falta ese 'ay' que me encoge el estómago y me corta la respiración, pero no es este un libro con esas pretensiones. En lo suyo funciona y es bueno, y lo sé porque he permanecido metida en la película en todo momento, dejándola sólo por 'requisitos publicitarios' pero volviendo a ella para no perderme nada. Cuando acepté la propuesta de ser miembro del jurado de este premio me prometí a mí misma dejar al margen mis preferencias personales y yo, al igual que Coburn, también cumplo. Elegí este libro como primera lectura por ser precisamente el que menos me llamaba la atención a priori, y sin embargo me ha resultado en parte una grata sorpresa. Estoy contenta porque esto es lo bonito y el leitmotiv de este proyecto, descubrir libros y autores nuevos o desconocidos. García Naranjo y su novela sin duda bien merecen una oportunidad. Aún me quedan tres libros más por leer y reseñar y lo seguiré haciendo por orden de preferencia. Tal vez con alguno me lleve una sorpresa pero a la inversa. Aquí estaremos para contarlo pero eso ya es otra película.
"-Sé qué clase de hombre es. Lo sé por sus ojos, por la forma de mirarme. Bob nunca me miró así, ni siquiera en sus peores momentos. Mi padre sí. -Los muelles de la cama crujieron cuando Patty se sentó en el borde-. Mi madre decía que esa mirada se la trajo de la guerra. Papá estuvo en el frente europeo. Francia y esos sitios que asocio a ruinas e imágenes en blanco y negro. En ocasiones, cuando pensaba que estaba solo con el periódico en el regazo y una lata de cerveza en la mano, tenía esa mirada.-¿Qué mirada?-La del hombre que hace cualquier cosa con tal de estar vivo un día más."

Film. Fotografía de Leo Hidalgo

Ficha del libro:
Título: Coburn
Autor: Pablo García Naranjo
Editorial: Tysannosaurus Books
Año de publicación: 2015
Nº de páginas: 222