En casa nos encantan los dulces, la bollería, bizcochos, magdalenas… siempre intentamos que para la merienda no nos falte algo de esto para retomar fuerzas a media tarde y llegar bien a la cena.
Nos cuidamos bien, no os voy a engañar jejeje
Alguna vez que otra cae por casa algo de bollería industrial, que aunque no es muy sana ni saludable y la casera sea mil veces mejor no hay quien imite los donuts en sabor o textura al 100%, y quien dice unos donuts dice unos pandorinos o unos bollicaos. Que una vez al año no hace daño.
Pero vamos que en casa lo que realmente gusta es ese gusanillo que te entra en el estómago y el saliveo en la boca cuando el olorcito de un bizcocho sale de horno cuando se está horneando. Esa espera que te hace abanicar al bizcocho cuando lo sacas del horno para que tarde lo menos posible en enfriarse y así hincarle el diente cuanto antes.
Y cuando ya se ha enfriado lo justo y necesario, te preparas tu vaso de leche, te cortas tu trocito y das esos primeros bocaos que te saben a gloria, que están de vicio y cierras los ojos diciendo “pero que bueno que está esto”. Te lo terminas y te quedas mirando el resto con cara de pena mientras piensas “un trocito más? Venga!” y te comes el segundo y vuelves a mirar el que queda con cara de perro pachón y piensas “otro? No, no, no, no más que si no luego la báscula no perdona, jooo, pero es que está muy bueno! Que no, que no, para luego” y decidido te levantas de la silla para recoger todo y te sorprendes comiéndote las miguitas que han quedado sueltas, jejeje Verídico.
Y esto es justo lo que nos pasó con esta coca de llanda con manzana. Casi no llego ni a hacer las fotos.
Versiones de coca de llanda hay infinidad por la red, la verdad es que no he dado con dos recetas que lleven los mismos ingredientes y en prácticamente todos dicen que es la receta tradicional por lo que me quedo con ganas de conocer la auténtica receta original. En esto que aprovecho y hago un llamamiento para pediros que si conocéis la “autentica”, la que se hace de siempre, me la paséis para probarla. Mientras me quedo con esta adaptación que he hecho de todas las versiones que he visto.
Ingredientes:380g de harina250g de azúcar4 huevos250ml de leche250ml de aceite de girasol1 cucharadita de vainilla4 papelillos de gaseosa ( de los que viene en pareja de distinto color)2 manzanas Azúcar y canela molida para espolvorear por encima
Precalentamos el horno a 180 grados y forramos un molde rectangular con al menos unos 5cm de altura con papel de horno.Pelamos las manzanas, las descorazonamos y cortamos en trocitos pequeños. Reservamos.En un bol ponemos la harina junto con el azúcar y con unas varillas lo movemos bien para que los cristales de azúcar rompan los grumos de harina. Añadimos los sobriecillos de gaseosa y volvemos a mezclar.Incorporamos los huevos, la leche, el aceite y la vainilla, mezclamos todo bien con las varillas hasta conseguir una crema fina.Añadimos los trocitos de manzana, volvemos a mezclar y ponemos la crema en el molde, espolvoreamos por encima azúcar y canela.Horneamos unos 35-40 minutos o hasta que al pincharlo el palillo salga limpio.
Animaos a probarla, a cambiarle la fruta si no os convence la manzana o hasta a prepararla sin ella, os aseguro que disfrutareis comiendo este maravilloso bizcocho.
Mil besos a todos, nos vemos en la próxima entrada, muuuak.