Coches eléctricos para niños que alimentan emociones

Por Demieles

Coches eléctricos para niños, parece una idea quizás un tanto descabellada. Sin embargo, numerosos estudios han llegado a la conclusión de que algunos juguetes infantiles, en particular estos coches eléctricos, pueden llegar a ser muy beneficiosos para el desarrollo de los pequeños.

En el desarrollo de un niño hay muchos factores que los padres deben tener en cuenta. Pero está claro que existen los denominados potenciadores. Éstos ayudan a que se consigan los objetivos deseados en el crecimiento físico y emocional.

Juguetes para desarrollar habilidades

Los niños, desde muy corta edad, empiezan a desarrollar sus habilidades y las van poniendo a prueba en su día a día. Para conseguirlo, ellos mismos se van marcando retos nuevos en cada momento. En los diferentes ámbitos del entorno que les rodea, utilizan el juego como protagonista y epicentro de sus primeros años de existencia.

Los niños tienen una habilidad comunicativa en pleno proceso de expansión. Y constantemente muestran curiosidad por todas las cosas que desconocen. Aquí hay que destacar el papel que tienen los padres como referente explicativo en un contexto de aprendizaje continuo.

Elementos como los juguetes, y en este caso los coches eléctricos para niños, son potenciadores del denominado juego simbólico para los más pequeños de la casa. Esa faceta creativa que el niño tiene de forma natural le hace trasladarse a otros escenarios imaginarios ajenos a lo que le rodea.

Los coches eléctricos como juego

Manejando los coches a batería para niños les estamos dando una herramienta adaptada a su edad. Con este divertido y atractivo juguete el niño conduce, se entretiene y desarrolla una destreza cuyos beneficios están más que demostrados científicamente.

Debemos tener en cuenta que, además de la imaginación, el niño interpreta otros personajes cuando se pone a los mandos de un coche eléctrico. Es una parte importante del desarrollo del juego simbólico que también se fomenta compartiendo esos momentos de ocio con otros niños. Se trata de un trabajo de socialización que es importantísimo en todos los niveles.

La actividad que el niño realiza a los mandos de ese juguete le permite imitar a sus propios progenitores cuando conducen. Ya sea en los parques o en la calle acompañados de un adulto, los niños encuentran en estos vehículos de cuatro ruedas un juguete perfecto para la diversión en cada momento.

Seguro que habéis visto en muchísimos lugares de ocio adaptados a los más pequeños alguno de estos coches eléctricos a batería. El juego con el vehículo se transforma y se asemeja cada vez más a la realidad que él percibe.

Está claro que siempre hay que sacar tiempo en el estrés diario para nuestros hijos. La relación entre padres y niños se sustenta en compartir momentos y más si son relacionados con el juego y la diversión. La inversión en tiempo con los hijos debe entenderse como un beneficio en el crecimiento del menor que tendrá sus frutos.

¿Qué beneficios aportan los coches eléctricos en los niños?

Quizás pienses que este tipo de juegos NO puede ayudar en el desarrollo de un niño. Parece más bien una actividad básica, la de conducir un cacharro con ruedas que se mueve con una pequeña batería y hace que el niño haga poco ejercicio físico.

En un principio lo normal es encontrarse un poco reticentes a este tipo de juguetes. Sin embargo, especialistas como psicólogos y pedagogos nos demuestran las ventajas que ofrecen a los pequeños.

Compartir momentos de juego

La primera de ellas es el que ya os he comentado, el juego simbólico y la oportunidad de compartir momentos lúdicos con los peques.

¿Quién no recuerda de pequeño haber jugado a ser maestro, cocinero o conductor? El jugar a manejar un volante y controlar la velocidad es sin duda uno de los mejores entretenimientos para cualquier niño.

Ni qué decir tiene que conducir un auto es una de las atracciones estrella en cualquier feria. ¡Es de las que mi peque por ejemplo más pide montarse, jeje!

Inteligencia a través del movimiento

Otro de los factores que mejoran con el juego con estos pequeños vehículos es la denominada inteligencia corporal cinestésica.

Se trata de mejorar el desempeño físico uniendo el cuerpo y la mente. El niño o la niña mejoran las capacidades para controlar actividades físicas. Una de las claves de este aprendizaje es la coordinación que el peque consigue.

Además, un juguete como es el coche eléctrico provoca una mayor facilidad para aprender. Lo hace a través de las emociones directas que el niño siente en su divertida experiencia.

Ayuda a desarrollar las destrezas

Esto se consigue porque mejora la capacidad de sincronización de movimientos físicos y mentales. El frenar, acelerar, girar y mover el volante proporcionan la capacidad de desarrollar y coordinar sus destrezas temporales y espaciales.

Mayor socialización

A través de la imitación de los roles de los adultos, empiezan a socializarse con otros niños. Hay muchos parques de tráfico infantil en algunas ciudades que ayudan a que los niños apliquen las normas de seguridad vial y de circulación. Es un buen momento para enseñar a compartir el espacio y respetar las normas.

También conseguiremos, compartiendo momentos de juego con ellos, mejorar sus habilidades sociales. Esto está directamente relacionado con el juego, como puedes ver en mi anterior post Las habilidades sociales y el juego en la infancia.

Creatividad y autoconfianza

Los niños crean sus propias historias mientras imaginan que van conduciendo en medio de una aventura por el desierto o de camino al trabajo. Es el comienzo del juego simbólico que permite desarrollar su personalidad con fuerza.

¿Qué debemos de tener en cuenta al elegirlo?

Para que todos estos beneficios sean posibles, tenemos que elegir bien el coche eléctrico para niños. No todos los modelos son iguales, ni se adaptan a las características y necesidades de cada pequeño.

Los especialistas recomiendan comenzar a utilizar coches eléctricos a partir de los 2 o 3 años. Aunque existen modelos para prácticamente cualquier edad.

Por supuesto, han de estar correctamente homologados. De este modo, nos aseguramos de que cumplan todas las normativas necesarias en cuanto a seguridad infantil. Además, el material de fabricación debe ser resistente a los posibles golpes y preparado para evitar vuelcos.

Algunos modelos disponen de control remoto. Esto facilita el manejo por nuestra parte desde el exterior y permite una mayor sensación de libertad para el pequeño. Es bueno para que los niños comiencen a diferenciar aspectos espaciales como derecha o izquierda.

La potencia y duración de la batería es un factor muy importante a la hora de escoger un modelo de coche eléctrico para niños. Los puedes encontrar con una potencia de 6v, 12v o 24v.

Los coches eléctricos para niños 24v, por ejemplo, al ser de una potencia bastante alta pueden desplazar hasta 60 kg. Por lo general estos modelos también son identificados por ser bastante robustos y contar con dos plazas. La potencia también influye en la duración de la batería y en su autonomía.

Coches eléctricos para trasladar a niños a quirófano

Seguro que no imaginabas la cantidad de beneficios que se podían encontrar gracias a los coches eléctricos para niños.

Pues bien, en algunos centros hospitalarios ya han llegado también a esta conclusión. Y utilizan los coches eléctricos para ayudar a sus pequeños pacientes. Así pueden sobrellevar mejor la difícil situación de una intervención médica.

En estas clínicas han decidido poner en práctica este estupendo recurso. Allí, comienzan a utilizar los coches eléctricos para trasladar a los niños que necesitan una operación médica.

El momento de trasladar a un niño al quirófano le genera miedo, estrés y ansiedad. Esto puede afectar a la hora administrar la anestesia y también en la fase de despertar.

Así que, el uso de estos coches les ayuda a olvidar el miedo a un entorno desconocido para ellos. Convierte en algo divertido un proceso que no siempre es fácil.

Los niños entran a quirófano más tranquilos y contentos y disocian esa fase de algo negativo o traumático. Esto además, facilita la tarea del personal médico. Y ayuda también a los padres a sobrellevar la intervención quirúrgica de sus hijos.

Menos ansiedad, menos estrés y, por tanto, un mejor despertar tras la intervención. Éstos son algunos de los beneficios que aportan los nuevos coches eléctricos en el campo de la medicina.

¡Seguro que ahora verás los coches eléctricos para niños desde una perspectiva diferente!

¿Conocías todos los beneficios que podían aportar los coches eléctricos en los niños? Te agradezco que dejes tu opinión en los comentarios.