Ya está de nuevo por aquí el reto más artístico, el CocinArte, y este mes lo hemos hecho especial Navidad, y para ello el cuadro elegido fue El censo de Belén de Brueghel el Viejo.
Como podéis ver el cuadro tiene mucho por ver, muchos personajes y la verdad es que nos transporta a la época de Navidad.
El tema se deriva del empadronamiento decretado por el emperador Augusto descrito en el Evangelio según san Lucas.
Brueghel pinta un pueblo flamenco en invierno, al atardecer, en el que las figuras de los protagonistas, la Sagrada Familia, son de pequeño tamaño y aparecen intencionalmente perdidas en ese amplio entorno nevado, transmitiendo una viva sensación de desamparo. La Virgen, en cinta, va montada sobre una mula que sigue, junto al buey, los pasos de San José, al que vemos con ancho sombrero, llevando un cesto en el brazo y una gran sierra al hombro, símbolo de su profesión.
A la izquierda un grupo de personas se agolpa frente al edificio del censo, sobre el que figura el águila bicéfala de los Habsburgo. Vemos a la gente entregada a sus quehaceres diarios: unos entretenidos con la matanza del cerdo; otros recogen leña; hay quien carga un carro con nieve, o la despeja con una escoba; los niños hacen sus guerras; las llamas de la hoguera de un grupo de soldados congrega a otros, y un sin fin de detalles que dejo por descubrir a la curiosidad del lector. Al fondo, un castillo en ruinas recuerda las torres y puertas de Ámsterdam.
Yo para "recrearlo" decidí hacer unas galletas Linzer, que son absolutamente deliciosas y que además son preciosas.
Las galletas Linzer son originarias de Austria y creo que son una adaptación de la tarta Linzer, que se hace a base de almendras o frutos secos y con mermelada. La tarta se coronaba con un enrejado y las galletas van con un agujerito en medio. A mi me parecen preciosas y además están ricas ricas.
¡¡A ponerse el delantal!!
Ingredientes:
- 240 gramos de almendras molidas.
- 375 gramos de harina.
- 140 gramos de azúcar glas.
- 240 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
- 1 huevo.
- Mermelada de arándanos.
- Azúcar glas para decorar.
En un bol poner las almendras molidas, harina, el azúcar glas, la mantequilla y el huevo y mezclar todo bien con ayuda de unas varillas para amasado. Podéis hacerlo a mano pero se tarda menos con las varillas especiales de amasado y además es más cómodo.
Una vez se tenga todo los ingredientes integrados, se forma una bola con la masa y se envuelve en film transparente y se lleva a la nevera durante al menos una hora.
Estirar la masa y darle la forma deseada, yo elegí darles forma de estrella pero podéis utilizar el cortapasta que más os gusta.
Llevar al horno precalentado a 160º durante 12 minutos. Cuando queden cinco minutos, poner un poco de mermelada en las galletas que van a servir de base y volver a meter al horno. De esta forma la mermelada se solidifica y no se cae cuando le demos un mordisco.
Pasar las galletas a una rejilla y cuando estén frías, espolvorear las galletas con el agujerito con abundante azúcar glas. Montar las galletas.
Espero que os haya gustado.