El internacional luso se ausentó durante el día de los entrenamientos para resolver de cerca su situación profesional y esperaba que se cerrara a última hora una operación para ser transferido al club inglés. "Fueron horas difíciles, claro, que él (Coentrao) vivió con ansiedad y que acabaron con una natural frustración", afirmó una fuente recogida por el periódico.
Durante la noche de espera, el jugador portugués recibió el apoyo de otros convocados por la selección, como su compañero de equipo, Cristiano Ronaldo, y de Nani, del Manchester United. Las negociaciones de los españoles con los ingleses dieron pie a otras paralelas entre el Real Madrid y el Granada, para que el lugar de Coentrao fuera ocupado por el lateral brasileño Guilherme Siqueira, que finalmente recaló en el Benfica.
Los jugadores portugueses continúan los entrenamientos un día antes de viajar a Belfast para enfrentarse el viernes a Irlanda del Norte, en un partido de clasificación del Mundial de Brasil.