Combatiendo al viento sobre la bicicleta: diez trucos para que no tengas que quedarte en casa si vez que las copas de los árboles se mueven IX
by Macos Pereda Herrera 17 octubre, 2014 0 commentsDesde Merkabici queremos dejarte claro que todos los días del año se puede andar en bici…y que los días que te quedes en casa, perezoso y sin ganas de salir, serán luego los que eches en falta cuando el resto de compañeros de grupetta te saquen los ojos en la primera subida que haya. Y aunque pensamos que tampoco hay que hacer esfuerzos baldíos, ni salir por obligación, sí que nos gustaría contarte algunos trucos interesantes que puedes poner en práctica para salir sin problemas los días que haya mucho viento. Para que sufras un poquito menos, ¿no?
Hoy vamos a tratar el tema de la ropa. Y es que si vamos a tener que sufrir frente al viento…y créetelo, vamos a sufrir y mucho, lo mejor es que no añadamos más problemáticas por nuestra parte en base a situaciones tan evitables como llevar ropa inadecuada para esos días. Así que…al trabajo, amigo cicloturista.
Bien, cuando tenemos un día con mucho viento debemos de cuidar especialmente que nuestra resistencia al aire sea lo menor posible, ya que de ese dato van a depender las fuerzas que gastemos de más durante el pedaleo. En otros artículos hemos hablado de acoplarnos a rueda, de ir con una buena postura o con cadencia alta, y hoy vamos a abordar la vestimenta.
La vestimenta del ciclista es, de por sí, muy ajustada, ¿verdad? Seguro que incluso alguna vez te ha parecido que demasiado ajustada…Pues en estos días tendrás que optar por tu maillot y coulotte más ajustado, ese que no deja nada a la imaginación, pero que tampoco queda nunca suelto al viento y jamás te hará ese incómodo efecto de paracaídas que en días de mucho aire te puede llegar a volver loco. Por descontado que tienes que tener también muchísimo cuidado con los chubasqueros, que son las prendas que más efecto burbuja hacen, por lo que tienes que intentar evitaros a no ser que llueva y sea imprescindible ponértelos. El casco tendrás que llevarlo bien ajustado, no sólo por seguridad, sino también para que no bailotee en tu cabeza, y procurarás que en toda tu vestimenta no hay ni una sola arruga o doblez por donde el viento pueda colarse y hacerte la vida imposible frenándote en seco.
Una vez encima de la bici tendrás que intentar cambiar lo menos posible de postura, y cuando veas que alguna de tus prendas se está convirtiendo en un paracaídas. No dudes en pararte y corregirlo. Si es un chubasquero puedes quitártelo y echarlo al bolsillo del maillot. Y si es otra prenda la que hace ese efecto puedes intentar corregirlo metiendo algo debajo del maillot, por ejemplo un periódico, para que te quede más ajustado. Todo sea por sufrir lo menos posible con el viento, ¿no? Porque sufrir…ay amigo, sufrir vas a sufrir. Pero también disfrutarás encima de la bici, ¿verdad?