Esta no es la primera vez que Comcast quiere hacerse con una “fábrica” de contenidos. Ya lo intentó en 2004 con The Walt Disney Company y tuvo que dar marcha atrás (mucho trigo para tan poco pollo?).
Antes de que se diera la confirmación, la noticia se filtró a la prensa y en septiembre el rumor era casi un clamor. En este entorno yo me preguntaba sobre los motivos de la operación. ¿Qué hacía un operador de cable (el mayor de Estados Unidos) comprando una factoría de contenidos/canales (de las mayores de EE.UU?
Cuando preguntaba sobre esto a amigos y “cómplices” conocedores de la operación me argumentaban motivos estratégicos relacionados con la proximidad al cliente del operador de cable y justificaban que Comcast podría conocer mejor las necesidades del cliente y anticipar las tendencias a futuro.
Creo que esta justificación es muy válida pero hace poco encontré una más financiera y menos de negocio. El gráfico inferior muestra la evolución del ”cash flow” (el dinero “de veranear” que diría algún profesor de finanzas…) de NBC y el análisis del mismo da motivos más que de sobra para justificar la operación e incluso el valor de la misma. NBC es una máquina generadora de caja, pero también es cierto que su “espíritu” GE la hace una compañía competitiva y exigente en la gestión, un estilo o identidad cultural que no tiene por qué ser coincidente con el estilo de Comcast.
La gestión de identidades culturales y corporativas de estos dos grandes del sector de medios en EE.UU será uno de los aspectos críticos de la fusión. Algo que no se anticipa fácil, sobre todo si se gestiona como el conflicto (creado gratuitamente) entre Jay Leno y Conan O`Brien… pero esto ya es “harina de otro post”….