Habíamos oído hablar de que se comía muy bien y que tenía una decoración que recordaba a los típicos lofts de Brooklyn. Después de nuestra experiencia personal, podemos confirmar que las dos opiniones son verdaderas.
El local nos gustó mucho, muy hyspter todo jeje y la comida estaba fabulosa. Raciones contundentes y precio bastante ajustado.
Eramos cuatro personas y para empezar, lo hicimos con dos entrantes para compartir. Los escogidos fueron el surtido de hummus (de garbanzos, berenjena...) y los fish and chips de bacalao.
Los principales fueron de lo más variado:
Hamburguesa vegetariana
Hamburguesa con jalapeños
Wok de verduritas
Ensalada templada
Para beber, nada del otro mundo, 3 refrescos, 1 agua y 1 clara y de postre,
Tarta de queso
Gazpacho de fresas
Creppes de dulce de leche
Nosotros salimos encantados de la experiencia: buen trato, buena comida, buena decoración y el precio de 72,20 euros (recordemos que fueron 2 entrantes, 4 platos principales, 5 bebidas y 3 postres).