Hoy toca hablar de un sitio abierto desde hace poco tiempo en la ciudad de Santiago de Compostela, y más en concreto, en la histórica Plaza do Toural, en pleno Casco Antiguo de esta ciudad. Se trata de un sitio pequeño pero muy bien situado: Bocalamar.
La mejor manera de explicar este sitio es decir que es el “tradicional puesto de calamares en versión 2.0”. ¿Por qué digo esto? Bueno, porque ofrece lo típico que ofrecían esos puestos muy populares hasta hace no muchos años, aunque bajo una nueva fórmula más acorde con los tiempos actuales.
¿Qué ofrecen en establecimiento? Podría explicarlo aquí mismo, escribiendo unas pocas líneas, pero creo que una imagen vale más que mil palabras, así que os traigo en una imagen la oferta gastronómica de este local:
Como podéis ver, es una oferta reducida, pero sencilla, y bien pensada para un sitio de este tipo: bocata de dos tamaños y ración. La primera innovación de este sitio respecto al tradicional puesto de calamares es la opción de poder escoger salsas como el alioli, la mayonesa, o la mayonesa negra, que complementan la típica oferta de incluir limón para acompañar a los calamares.
Para esta crítica gastronómica, se ha escogido la ración de calamares, acompañado de limón, por ser la manera más habitual de comer calamares, y lo he pedido para llevar. Así se presentaban los calamares:
Vayamos ya a como estaban esos calamares. He de decir que me sorprendieron gratamente. Se puede decir que son una especie de calamares light, por dos motivos: poco sabor a aceite, lo cual es un gran punto a favor, teniendo en cuenta como son los calamares normalmente, y, por otro lado, mucho menos rebozado de lo habitual. Me parece que son dos puntos muy a tener en cuenta para comer calamares sin pasarse con las calorías.
En cuanto a la ración, he de decir que, en mi opinión, y teniendo en cuenta que no como poco, podrían ser más generosos, sobre todo teniendo en cuenta su precio. Que los calamares están muy buenos, si, pero por el precio que se oferta, 6 o 7 anillas más no vendrían mal a la ración.
También he decir a su favor, que sus productos se preparan en el momento, y además lo hacen en poco tiempo, en 2-3 minutos sueles tener ya tu consumición lista para comer, lo cual es muy bueno para comer bien especialmente si no tienes mucho tiempo para comer.
En conclusión, si te apetece comer calamares sin pasarte con las calorías ni con el presupuesto, o no tienes mucho tiempo para preparar comida o comer, Bocalamar es un buen sitio para ello. Buen producto e innovadora elaboración. Recomendable al 100%.
Simón de Eiré