Comer fuera estando embarazada

Por Sacaleches

Estar embarazada no supone estar enferma ni hacer una dieta estricta, aunque sí que se tiene que hacer una dieta saludable, por el propio bien y por el de la criatura.

Comer fuera no supone comer mal, y aunque por una vez que se salte una dieta no pasa nada, también es posible comer fuera y comer sano. Tan sólo se necesitará un menú sano que cuente con proteínas, hierro, minerales y vitaminas y calcio, todos estos son los nutrientes que se necesitan en el embarazo, entre otros.

A la hora de comer fuera, hay que evitar las comidas preparadas, el pescado o carne crudo o poco hecho, las vísceras, los quesos blandos y leche no pasteurizada y los huevos crudos. Todo lo demás se puede comer, pero en su justa medida y procurando contar con un menú equilibrado, teniendo en cuenta cuáles son los ingredientes de las comidas que se va a seleccionar.

Si se ve a tomar un desayuno debe ser más completo que un simple café, ya que el desayuno debería aportar hasta el 30% de los nutrientes que se necesitan al día. Las cenas no deben ser pesadas ni tener grasa, si se ha comido carne se puede cenar pescado y viceversa, o verduras.

La mejor guarnición son las verduras, las carnes deben ir sin salsa, el pan mejor integral, de postre fruta o un rico flan o helado de crema.

Si se va a comer fuera por trabajo o porque se pasan muchas horas fuera, picar es necesario, así que se puede contar con alguna pieza de fruta, galletitas, frutos secos o algo para picar.

Se deben hacer varias comidas al día, pero ninguna de ellas debe ser muy copiosa. La comida más importante es el desayuno, por lo que debe ser completo, pero las demás comidas también son importantes para aportar los nutrientes necesarios y evitar náuseas y mareos. Si se va a comer a un restaurante se puede pedir  un menú que se podría comer en casa, si se va a casa de amigos se debe tener en cuenta lo antes comentado evitando lo que no se pueda comer.