Comer sano durante las vacaciones de Navidad

Por Facildedigerir @facildedigerir

Texto original escrito por Ana.  Sígueme en Twitter.

¡Llegó la noche esperada! Muchos llevan semanas o incluso meses preparándose para el festín de este día: pavo, romeritos, bacalao, pierna, ponche, fruit cake…pero a muchas personas las acompaña una gran ansiedad por no poder controlarse y comer demasiado, afectando su peso y su salud.

He aquí unos consejos para comer sanamente durante la cena de Navidad:

Desayuna y come

Nada de saltarse comidas. Recuerden que dejar de comer causa el efecto contrario de lo que buscan: el cuerpo acumula más grasa cuando registra el ayuno, así que hagan sus comidas normalmente. Así además, evitarán llegar con mucha hambre y arrasar con las botanas.

No te prives de los platillos que te gustan, mide las porciones

¡Disfruta de esta fecha! Mejor servirse de todo un poco, que mucho de poco. Un consejo: que el 50% de su plato sea de ensalada, 25% de proteína (pavo, pollo, bacalao, carne) y 25% carbohidratos (arroz, pasta, pan). Otra buena opción es empezar con la ensalada.

Mastica

Comer despacio es importante porque así le damos tiempo al cuerpo de registrar la comida que vamos ingiriendo y hacer la señal cuando está satisfecho. Otro beneficio es que disfrutaremos más profundamente de sabores, aromas y texturas.

Toma agua natural y controla el consumo de alcohol

Los refrescos, ponches, jugos y bebidas alcohólicas contienen muchos azúcares. Evita el abuso en su consumo. En el caso del alcohol, ingiérelo siempre acompañado de alimentos. Toma agua natural para mantenerte hidratado.

Atrévete a decir: 'No, gracias'

Selecciona bien lo que quieres comer y no comas por complacer a los demás. No te sientas mal por declinar una invitación, escucha a tu cuerpo para detectar cuando ya estás satisfecho.

No abuses de los 'recalentados'

Está bien comer recalentado, pero este no te puede durar dos semanas. La comida de Navidad es justamente para esa fecha, después de ella debes seguir con tu dieta saludable de manera cotidiana.

¡Felices fiestas!