Título original: One day it’ll all make sense
Idioma original: Inglés
Año: 2011
Editorial: Atria Books
Género: Autobiografía
Valoración: Está bien
Para acabar con nuestra pequeña serie de “autobiografías de figuras del hip-hop estadounidense”, contamos hoy con Common (Lonnie Rashid Lynn), un rapero probablemente algo más conocido que Questlove (porque además de músico también es actor), pero que tampoco es una de las estrellas más populares del género. Siempre ha sido clasificado como un “conscious rapper“, es decir, un rapero cuyas letras se alejan de los lugares comunes frívolos del hip-hop (clubes, coches, piscinas, billetes, pistolas, champán, bikinis…), y tratan otros temas, generalmente con un contenido social y político importante, aunque también es conocido por sus canciones de amor.
Su autobiografía está escrita en colaboración con Adam Bradley, uno de los pocos investigadores académicos dedicados al hip-hop, y se titula One day it’ll all make sense (como su álbum de 1997): “algún día todo cobrará sentido”. Como ocurría en la autobiografía de Questlove, en la de Common también se escucha otra voz: la de su madre, que escribe el prólogo y que interrumpe de vez en cuando la narración de su hijo para puntualizar las opiniones de éste o complementar su punto de vista. Common muestra también en su autobiografía un cierto afán de originalidad en la estructura, aunque no llega a estar a la altura de la de Questlove. One day it’ll all make sense está dividido en 12 capítulos que se corresponden con grandes temas en la vida de Common (familia, amor, paternidad, educación, amistad…) y que están titulados como algunas de sus canciones, por lo que su autobiografía sirve también como una especie de auto-recopilatorio musical. Cada capítulo comienza con una carta escrita por Common y dirigida a diferentes destinatarios: su madre, su padre, su hija, Emmet Till (un niño negro asesinado por blancos en los ’50), el propio lector, Erykah Badu (cantante y ex-novia de Common), el hip-hop e incluso sus hijos no-nacidos (por abortos de sus novias). Tras la carta inicial, los capítulos se desarrollan mediante una estructura circular en la que Common va desgranando las experiencias de su vida relacionados con el tema del capítulo, haciendo especial hincapié en reflexiones o juicios personales sobre las decisiones que tomó a cada paso, para acabar con una cierta moraleja final que ya había sido adelantada en la carta del comienzo y que resume todo lo que el autor ha aprendido sobre el tema del capítulo a partir de sus experiencias.
De esta forma, One day it’ll all make sense parece tener dos finalidades. La primera de auto-ayuda y la segunda educativa. Auto-ayuda en el sentido de que Common parece haber escrito el libro para explicarse a sí mismo su vida, escribiendo cartas a sus seres queridos para contarles lo que siente por ellos, alabando sus grandes hitos, justificando sus grandes errores… Puede que ésta sea una característica intrínseca al género autobiográfico, pero en este caso es tan explícita y tan continua que llega a entorpecer la lectura. Por otro lado, aunque de forma muy relacionada con lo anterior, está la finalidad educativa, pues a lo largo de todo el libro Common parece estar poniéndose siempre como ejemplo de lo que hay y no hay que hacer en la vida. Quizá esto esté relacionado con una cierta obsesión por el liderazgo (una obsesión muy estadounidense, por cierto), por justificar una especie de llamada que Common ha sentido en su vida para ser líder o modelo a seguir. Esta obsesión entorpece también la lectura, sobre todo en el final del libro (llega un punto en el que el lector está deseando que se acabe ya), pero se entiende cuando se lee en la solapa que Common y su madre han fundado una ONG llamada Common Ground Foundation, destinada a “empoderar a estudiantes socio-económicamente desfavorecidos potenciando su talento creativo”. Esta ONG explica, además, que al final del libro haya una guía de lectura escrita por la propia madre de Common y destinada a que estudiantes de instituto reflexionen sobre el contenido del libro.
Así pues, el continuo afán educativo y ejemplificante es el principal aspecto negativo de esta autobiografía, al menos desde el punto de vista de un lector adulto. Pero hay que ser justos y aclarar que pese a ello el libro (sobre todo la primera mitad) ofrece una lectura amena y muy informativa sobre la vida y obra de Common, que es al final lo que uno busca al leer una autobiografía, ¿no? Entre los aspectos positivos yo destacaría por un lado el uso de fragmentos de las letras de sus canciones como apoyo y complemento de los hechos narrados, entrelazando vida y obra y consiguiendo que los fans de la música de Common entendamos mejor el contexto de sus discos. Por otro lado, es digno de mención el comienzo de la autobiografía, con un ritmo frenético, casi de novela policíaca, y que consigue enganchar rápido al lector. Sólo citaré la primera frase del libro, para evitar spoilers:
Dear reader:
When I was eighteen months old, my mother and I were kidnapped at gunpoint.
My father held the gun.
//
Querido lector:
Cuando yo tenía dieciocho meses, mi madre y yo fuimos secuestrados a punta de pistola.
Mi padre sostenía el arma.
Tras la lectura, One day it’ll all make sense resulta ser exactamente lo que el título indicaba: un perfecto ejemplo de cómo hacer que al final todo cobre sentido en tu vida. No será el mejor libro que leáis, pero si os gusta Common no deberíais perdéroslo. Además, hay que reconocer que está perfectamente escrito y estructurado (al final de cada capítulo todo cobra sentido). Y, sobre todo, leyéndolo aprenderéis una lección importante: la vida puede que sea una mierda, pero hay que contársela a uno mismo de forma que al final todo tenga sentido.
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