El puente de diciembre suele marcar el pistoletazo de salida oficial de la Navidad. Muchos hogares aprovechan este descanso para decorar sus casas y para montar el Belén y el árbol de Navidad. Y, a partir de este momento, arrancan las comidas, cenas, reuniones y diferentes celebraciones tan típicas de estas fechas en las que, cómo no, se aprovecha para organizar “amigos invisibles” y entregar regalos a los amigos, familiares y demás seres queridos.
Aquí comienza el dilema: ¿qué regalo este año? Te lo voy a poner muy fácil… ¡A nadie le amarga un perfume o una colonia. Por eso puedes apostar por una caja de perfumes de mujer para Navidad, un acierto seguro.
Ahora bien, debes conocer bien a la persona que vas a regalarle el perfuma, pues el tema de los aromas es muy personal. Debes afinar bien para tener buena puntería. Seguro que estas recomendaciones te resultan de gran ayuda. Solo tienes que pensar bien en cómo es esa mujer a la que vas a dirigirte y acertarás de lleno. Una fragancia bien elegida, se convertirá en el regalo estrella de estas fechas (¡Y de cualquier otras!)
Perfumes para las más dulces
Hay mujeres que sienten pasión por los perfumes golosos, fragancias “gourmand” caracterizadas por acordes como la vainilla, el coco, el caramelo, el cacao, el algodón de azúcar… ¡Son prácticamente una golosina! Su aroma casi debe evocar el de una pastelería o de una tienda de chucherías. Las mujeres que llevan estos perfumes suelen tener un espíritu joven y alegre y vestir con prendas de vivos colores.
Perfumes para mujeres sibaritas
A este tipo de mujer le suelen atraer los acordes dulces, pero no tan empalagosos como a las anteriores. En este caso las notas de las fragancias deben ser golosas y duraderas, pero no tan intensas como las anteriores. Deben contener notas afrutadas (como la frambuesa, la pera, la piña, el mango, la grosella negra…), aderezadas por acordes florales (de jazmín, azahar, gardenia, lirios…), pero la combinación debe ser muy sutil. Se trata de aromas chispeantes, pero con unos toques frescos que quiten el “toque recargado” que poseen algunas fragancias extremadamente golosas.
Perfumes para las más elegantes
Las mujeres más sofisticadas suelen decantarse por opciones sobrias, de esas que nunca fallan. Esos perfumes clásicos, de toda la vida, a los que seguramente son fieles desde hace años. Suelen decantarse por esencias duraderas, pero con notas discretas, de esas que dejan una estela delicada, pero sin recargar.
Perfumes para las más frescas
Las mujeres con espíritu joven, casi aniñado, suelen sentir devoción por los aromas frescos, infantiles, que huelen a limpio. Seguro que tienes alguna amiga, familiar o conocida que huele a bebé. Las fragancias fresquitas que utilizamos para perfumar a nuestros pequeñines también pueden ser un buen recurso, especialmente en los días en los que apuestas por un look casual y desenfadado que quieres ofrecer una imagen natural, sencilla y sin demasiadas estridencias.
Perfumes para las más ácidas
En este caso, los cítricos se llevan la palma. Los aromas con toques de limón, naranja, mandarina, lima… son los más recurrentes y exitosos del mercado. Suelen ser fragancias delicadas, que dejan una estela fresca y muy agradable. Por eso hay tantas fragancias que parten de notas cítricas… ¡Porque saben que tienen muchas adeptas! Se trata de elecciones súper acertadas para el día a día, porque son discretas, pero dejan huella.