Cómo afrontar las sequías

Por Naturalzone

La sequía es un fenómeno que se ha dado con mayor frecuencia durante los últimos años, debido a variaciones en el clima y en el ciclo hidrológico, por ello, implementar medidas para prevenir y mitigar sus efectos tiene por objetivo el suministro de agua.

La sequía es un fenómeno que se refiere a un conjunto de factores como son: la disminución de las precipitaciones, la reducción de los caudales de fuentes de agua superficiales y la falta del recurso hídrico para satisfacer las necesidades de la población (Comisión Nacional del Agua, 2014). De este modo se puede identificar cuatro tipos de sequía:

- Sequía meteorológica (precipitaciones).
- Hidrológica (escurrimientos y almacenamiento).
- Agrícola (Escasez del agua para satisfacer las necesidades de las actividades agropecuarias).
- Socioeconómica (la cantidad de agua afecta a la economía de la población).

De acuerdo a la Comisión Nacional del Agua (2014) una definición de sequía puede ser: "disminución temporal y significativa de los recursos hídricos durante un periodo suficientemente prolongado que afecta un área extensa con consecuencias socioeconómicas adversas".

Figura 1: Sequía en el chaco boliviano


Fuente: www.elpotosi.net

Medidas de Prevención y Mitigación

La sequía es un fenómeno natural que no se puede evitar pero que sí se puede prevenir y mitigar sus efectos negativos tanto ambientales como socioeconómicos. El principal objetivo es el de preservar la calidad del agua y los ecosistemas asociados con el fin de garantizar el uso sostenible de este recurso a mediano y largo plazo. Las medidas de prevención se refieren a las medidas implementadas antes de la sequía, que permiten anticipar los recursos necesarios y organizar las actividades necesarias para enfrentar la misma.

De manera general, mejorar la eficiencia y sostenibilidad en el uso del agua se debe aplicar a todos los sectores económicos para que el consumo del agua sea sostenible en el tiempo. En la Agricultura

La eficiencia debe mejorar desde la implantación efectiva de los sistemas de asesoramiento en regadío y de buenas prácticas de riego para que los agricultores puedan ajustar su consumo a las necesidades reales de los mismos y fortaleciendo en periodos en sequía (Hernández, 2012). La prevención de la desertificación se hace necesaria para evitar los incendios y la sobreexplotación del agua y el suelo, fomentando las prácticas que reducen la erosión e incrementan la cantidad de materia orgánica en el suelo. Estas prácticas también mejoran la capacidad de retención de agua y reducen la vulnerabilidad a la sequía.

Figura 2: Cultivos afectados por la sequía

Fuente: www.aquapurif.es

Otra medida que puede ayudar a mejorar la eficiencia de los regadíos es la modernización de los mismos, ya que evita que grandes volúmenes se evaporen hacia la atmósfera.

En ciudades, industria y sector turístico

La implementación de dispositivos ahorradores para el uso del agua en el sector doméstico puede mejorar la eficiencia del consumo en este sector, además la educación ambiental en el uso eficiente del agua juega un papel importante, ya que promueve un uso adecuado y sostenible del mismo (Hernández, 2012).

Figura 3: Talleres de sensibilización sobre el consumo del agua

Fuente: www.ceajalisco.gob.mx

De la misma manera, se debe mejorar las redes de distribución, evitando que existan fugas. Además, se debe implementar plantas de tratamiento de aguas residuales para reutilizar el agua en sistemas de riego.

Figura 4: Ruptura de conducto de distribución de agua potable

Fuente: www.aguayambiente.com

Mejorar la planificación incorporando los factores de sequía y escasez

Se requiere elaborar planes estratégicos frente a las sequías para gestionar de manera sostenible el recurso hídrico. Para poder elaborar los mismos se requiere estudios científicos rigurosos que contribuyan al conocimiento de los cuerpos de agua presentes y las fuentes disponibles para una mejor gestión.

Del mismo modo, el ordenamiento territorial y las políticas sectoriales promoverán un desarrollo menos dependiente del agua y más sostenible. Así también se debe coordinar a nivel estatal las acciones sobre las necesidades de cada departamento o ciudad frente a las sequías para darles una solución efectiva.

También se debe procurar que cada municipio elabore su propio plan de contingencias frente a las sequías y/o escasez de agua que incluya metodologías para detectar el fenómeno de manera casi inmediata, considerando un criterio para la toma de decisiones y la mitigación del mismo.

Adecuar otros instrumentos para prevenir la escasez y gestionar las sequías

Se debe mejorar los indicadores y protocolos de alerta temprana frente a sequías para que los agricultores puedan planificar la siembra y el riego (Hernández, 2012). Las tarifas de agua también deben ser corregidas para adecuarlas a las necesidades de la población y a los recursos hídricos disponibles. También se debe evitar el consumo ilegal del agua o el consumo en exceso, para tener un mayor control de este recurso.

Las medidas de mitigación y prevención de sequías son una forma de hacer frente a las mismas, anticipando el uso de recursos económicos y humanos necesarios, de modo que se puede evitar llegar al punto de no contar con este recurso para satisfacer la demanda de la población y de los sectores agropecuario e industrial.

Todo esto permitirá hacer una mejor gestión del recurso hídrico, lo que resultaría en un ahorro.

REFERENCIAS:

Comisión Nacional del Agua. (2014). Programas de Medidas Preventivas y de Mitigación de la Sequía: Guía de elaboración para usuarios urbanos de agua potable y saneamiento. Comisión Nacional del Agua, México.

Confederación Hidrográfica del Duero. (2007). Medidas de prevención y mitigación de las sequías. Ministerio del Medio Ambiente, Valladolid, España.

Álvarez, C. (2010). ¿Cuántas veces se puede reciclar? Disponible en: http://blogs.elpais.com/eco-lab/2010/10/cuantas-veces-se-puede-reciclar.html

CENAPRED. (2016). Acciones para combatir las sequías. Disponible en: http://cidbimena.desastres.hn/docum/crid/Junio2006/CD2/pdf/spa/doc15767/doc15767-f2.pdf