Este es un gráfico que puede cambiar tu relación con el corrector de ojeras para siempre, ¡te lo digo por experiencia! Hace no mucho descubrí cuál era la mejor manera de aplicarlo, y cuando me topé con este tutorial de Maskcara.com que recogía el mismo truco, decidí hacer un post para compartirlo con todas vosotras; una forma tan válida como cualquier otra de ganarme mi pedacito de cielo, ¿no te parece?
Las ojeras nunca vienen solas. Normalmente llegan acompañadas de bolsas, lo que acentúa el aspecto de cansancio. El truco para disimular unas y otras es no aplicar el corrector como se ilustra a la derecha, ya que aparte de parecer que has estado esquiando -o conseguir el archifamoso efecto "Ojos Panda"- el resultado será que resaltarás aún más las bolsas.
Sin embargo, si lo extiendes como se indica a la izquierda -difuminando hacia los pómulos para evitar un corte entre el tono del corrector y el del resto de la piel-, cubres las ojeras y repartes la atención entre ojos y mejillas.
Te aseguro que este truco funciona; pero recuerda que también es importante:
-hidratar antes el contorno, -no excederse con la cantidad de corrector, -aplicarlo con suavidad, -y por supuesto, escoger el tono adecuado.
Yo pongo el corrector siempre antes del fondo; aunque a veces, si tengo muchas ojeras, vuelvo a aplicar un poquito después del maquillaje y sólo en la zona más oscura, la que está más cerca de la nariz.
Y tú, ¿cómo usas el corrector de ojeras?