Cómo armar una rutina de cuidados de la piel, parte 2.

Por Fruticienta

Ya les conté qué puntos tenían que tener en cuenta al armar una rutina en la primera parte de este post. Ahora que sabemos qué piel tenemos y qué necesita... ¿cómo se sigue?
Si no están acostumbradas a cuidarse la piel, la rutina debe ser lo más simple posible: eviten cantidad de productos porque van a cansarse y abandonarán enseguida. Mínimamente, los pasos para el cuidado de la piel deben seguirse durante 28 días para ver mejoras. Mi truco para que se haga costumbre es simple: el primer día que se empezó con la rutina, obviamente se cuenta como día 1,  pero si nos olvidamos algún día o noche de repetirla, volvemos a contar desde 1. No vale hacer trampa. La idea es generar un hábito, algo tan mecánico como lavarse los dientes. Además, generalmente se dice que esos 28 días son los necesarios para empezar a ver cambios en la piel. No esperen ver una piel luminosa al segundo día de tratamiento porque it's not going to happen.
Para quienes el cuidado de la piel es un momento de placer, la rutina es un momento de spa. Pero ¿cuáles son los pasos?
  1. El primer paso es la limpieza: ya sea con jabón, solución micelar, aceites o leche de limpieza, hay que retirar el maquillaje y la suciedad acumulada a lo largo del día/noche (porque aún durmiendo, la piel se ensucia).  Una piel limpia recibe mejor los nutrientes de las cremas. Primero retiran el maquillaje y después vuelven a limpiar. No es necesario que usen dos productos diferentes, pueden usar el mismo dos veces.
  2. Después viene la tonificación. Si no están acostumbradas a cuidarse la piel, pero quieren empezar, pueden saltear este paso, hay muchos dermatólogos que dicen que no es necesaria. Aunque, en su defensa, un buen tónico puede refrescar y arrastrar restos que la limpieza no se llevó.
  3. Luego viene lo más complicado: las cremas. Para quienes se confunden sobre qué va primero y qué después (crema para párpados, suero, nutritiva, etc) mi truco es que el primer producto que se va a colocar siempre tiene que ser el más liviano, el más parecido al agua (generalmente los sueros) y luego se aplican las cremas  hasta llegar a  la más densa. Y, si aplican productos para párpados, se alternan con los de rostro (¿se perdieron?): primero el suero del rostro, después el de párpados, para luego volver a colocar la crema de rostro y después la de párpados...  Les recomiendo empezar con una rutina simple, de 1 producto para la cara y otro para contorno, nada más. Con el paso de los meses o las ganas, pueden ir agregando cosas. Las cantidades son un problema, así que siempre recomiendo empezar con la menor cantidad. Si la piel queda con sensación tirante, la próxima vez tendremos que poner más cantidad. Y si la piel queda pesada, menos. Nunca se queden con que una crema "es pesada" si es la indicada para su tipo de piel, a veces ponen de más y el problema no es del producto.
  4. Una vez colocadas las cremas, la protección solar en el caso de que la rutina sea diurna. Y después de unos minutos, pueden aplicar el maquillaje.

No es tan difícil como parece, lo juro. Para no perderse, al principio pueden colocar etiquetas con números a los productos para saber más rápido qué va primero y qué después.
¿ya empezaron con su rutina?