la distraccion
Es un hecho que uno de los males más extendidos de nuestro tiempo es la distracción.
Yo mismo tengo que reconocer que suelo caer en la trampa de caer en las redes de la distracción.
Teniendo tantas cosas y herramientas que tenemos hoy en día para comunicarnos, a veces es difícil gestionar bien nuestro tiempo para lograr ser más eficientes.
Hace poco adquirí un móvil o celular, en el cual podía hacer lo mismo que hago en internet. Navegar, chatear y hacer un sinfín de cosas que hace 10 o 15 años era imposible.
Pero ante nuestros retos, proyectos, ideas y otras importantes realizaciones para nuestras vidas, es imprescindible tomar control sobre nosotros mismos.
No se trata en sí de prescindir por completo de estas herramientas de la tecnología moderna: como lo es el facebook, twitter, Messenger, whatsapp, etc., pero si es importante controlarlo lo mejor que podamos.
También en internet, tenemos acceso a una infinidad de información de la que a veces sin darnos cuenta, las horas pueden parecer minutos ante esta nueva ola de la información que estamos atravesando en estos momentos.
Es por ello que en primer lugar, es imprescindible darle un tiempo limitado a estas distracciones. Como dije en un artículo anterior, debemos ajustar los horarios para recibir las llamadas, por ejemplo aplazarlas para después de las 5 de la tarde, o bien después de terminar nuestro trabajo, proyecto, idea, etc.
Porque son las actividades más importantes del día a las que tienes que enfocarte y darles la prioridad que se merecen.
Por otro lado, internet es una herramienta maravillosa, y a la que le debo mucho ya que me ha permitido crear este blog y hacerte llegar esta información. Pero también, cada día somos más dependientes de él y cada día somos más consumidores de información, artículos, videos, música, archivos gracias a este medio.
Pero cuando queremos concentrarnos en algo que es muy importante para nosotros, lo mejor es que cierres todas las ventanas que tienes abiertas y te dediques a tu actividad primordial. Y sólo cuando termines puedes permítete un tiempo prudente de 20 minutos o media hora en navegar si así te apetece.
Esto te ayudará mucho a mejorar tu productividad, ser más eficiente con tu trabajo o proyecto y evitar la procrastinación también.
Por lo general, siempre trato de revisar mis emails y las redes sociales 2 o 3 veces al día, pero que no me consuma sino tan sólo 10 o 15 minutos solamente. De esta manera, puedo administrar mejor mi tiempo y no me pierdo en las distracciones que puedan desviar mi atención y mi enfoque hacia lo que considero más prioritario en mi actividad diaria.
Ahora bien, cuando tengas esa tentación de caer en la trampa y revisar tus emails, actualizar tu estado de facebook o cualquier otra cosa de menor importancia, haz una pausa de 10 segundos y pregúntate a ti mismo ¿Es necesario que haga esto? ¿Realmente quiero desperdiciar mi vida? O ¿Realmente lo que deseo es algo grande?
Son preguntas que pueden hacerte volver a la realidad y enfocarte más para evitar la distracción que puede alejarte de tus sueños.
Espero que te haya gustado éste artículo sobre la distracción y no olvides dejar tu comentario.
Un abrazo
Alexander Chinea