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Tenía muchas ganas de escribir este post que aunque no vaya mucho con la temática que últimamente sigo pero me apetecía muchísimo compartirlo con vosotros porque sé que os gustará leerlo.
Me he pasado mucho tiempo anclada en pensamientos y en creencias que me limitaban y me tenían bloqueada. Motivos por los cuales no era feliz, o no era feliz del todo. No tengo la fórmula mágica de la felicidad pero sí que he entendido que la vida es mucho más fácil de lo que a veces nos parece. Realmente la complicamos nosotros. Y hay muchas cosas que podemos hacer para mejorar nuestras propias circunstancias. Nosotros somos los únicos capaces de llegar hasta la felicidad.Van pasando los días y vives tu vida sin un rumbo, te dejas llevar. Y te dejas llevar sobre todo por tus pensamientos. Pensamientos que ante diversas situaciones pueden hacer que tu comportamiento sea el de acabar siendo una víctima de tu persona que sólo se lamenta de lo malo y no es capaz de ver lo bueno que tiene a su alrededor.Por supuesto que nos pasan cosas malas, que es lo normal y lo natural porque es la vida misma, no todo en la vida es bueno pero pensar que mal, que desastre de vida tengo, todo me pasa a mi, ahora se me ha roto la lavadora, uff, tengo que pagar el coche y no llego a fin de mes. Todo absolutamente a todo podemos darle la vuelta.De que nos sirve martirizarnos y quejarnos por tener que gastarnos lo que quizas no tenemos para arreglar la lavadora, si al final la tenemos que arreglar o buscar una solución. ¿No será mejor tener un pensamiento más positivo para poder enfocar la situación y que nuestro comportamiento sea otro?
Os pongo un ejemplo:
Tengo un accidente y me rompo una pierna, así que tengo 2 opciones.1- Me lamento (pensamiento) de lo mal que me va la vida, que justo en ese preciso momento me he tenido que romper la pierna. Me entristezco muchísimo, me deprimo profundamente (emoción) y suspendo todos los planes que tengo (comportamiento).2- Asumo la situación de mi pierna rota con responsabilidad y sin lamentarme ni martirizarme de lo mal que se porta la vida conmigo (pensamiento). Me vuelco en mi capacidad para resolver problemas con un enfoque positivo con coraje y valentía (emoción) y busco las opciones que tengo para los planes previstos (comportamiento).
La situación es la misma, pero ¿a qué la segunda es más alentadora?
Tu pensamiento tiene efecto sobre tus emociones y tus emociones sobre tu comportamiento.
Con esto no quiero decir que haya que verlo todo positivo en la vida ni mucho menos, que en la vida pasan cosa malas y lo bueno es bueno y lo malo, malo. No tener para llegar a final de mes es malo y punto, pero si nos hacemos responsables de nuestros sentimientos y pensamientos sin dejarnos llevar por ellos controlamos nuestras emociones y nuestro comportamiento por supuesto, cambia. Se abren puertas y se da luz a nuestra vida.Porque siempre hay puertas que abrir y luz, pero a veces nos ponemos nuestras gafas de sol oscuras y no nos preocupamos de buscar esa luz. Nos acomodamos y no avanzamos.
Aunque tu vida no sea perfecta puedes mejorarla cambiando de actitud generando sentimientos que faciliten pensamientos positivos.
Somos nosotros mismos quienes tenemos el poder de decidir de qué lado estamos, si en el lado de la víctima o en el lado de quien asume y busca una solución.
Todo consiste en buscar nuevos patrones de vida y no dejarse llevar por el día a día. Se trata de guiarte por ti mismo, tomar tus decisiones y dirigir tu vida.
Todos tenemos la energía y somos capaces de encontrar la solución. La clave la tienes en tu habilidad para gestionar tus propios sentimientos y pensamientos. No te dejes llevar por ellos, sé tu quien los lleve a ellos.
La vida no es fácil, a veces es dura, pero otras muchas veces es muy bonita y si te cierras y te dejas llevar por esas dificultades que encuentras en el camino te perderás cosas maravillosas.
Así que a día de hoy puedo decir que soy inmensamente feliz, que soy yo quien dirige mi vida y que no me dejo llevar. Y que si yo puedo hacerlo tu también puedes hacerlo. Todos somos capaces de hacerlo, tan solo hay que querer.
Esta entrada me recuerda a una que escribí hace ya bastante tiempo en la que hablaba de motivación para un emprendedor pero que podemos aplicar a cualquier faceta de nuestra vida. Dar pequeños pasos y disfrutar de cada logro es esencial para disfrutar de nuestra vida.
Disfruta de la vida, la vida es para vivirla.
Para tener el control sobre emociones y pensamientos a parte de tener ganas y querer un cambio hay herramientas de ayuda y algunos ejercicios que se pueden hacer que he pensado enviaros mediante Newsletter si os interesa, ya que como os decía antes ésta no es una entrada habitual del blog y en un principio a no ser que me lo pidáis no incluiré más.
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