Ella tenía pelo, encima fuerte, le crecía a lo largo, no sabía lo que era sentir la alopecia en sus propias carnes... así que ella misma me ha pedido que hiciera esta entrada para intentar ayudar a quien se encuentre en momentos complicados en los que la salud no acompaña, el estado de ánimo se encuentra abatido y se concluye pensando que el aspecto estético es un problema.
¿Cuál fue la situación?
Las enfermedades no avisan y de la noche a la mañana Mamá Envuelta en Crema se vio sometida durante casi un año a un fuerte tratamiento. No había opción. Era de los que sacan a la luz, al mismo tiempo que esconden, muchísimos efectos secundarios que te hacen pasar días seguidos en casa porque produce un déficit más que notable en la calidad de vida. De esos que hace que el médico te de una hoja con instrucciones de cómo va a ser tu día a día a partir de ese momento y en que lees: "el día que tengas fuerza, haz comida y sal a hacer la compra para toda la semana porque habrá momentos en los que no te puedas ni levantar". Y para rematar la faena prefiero mostrar con imágenes lo que le sucedió y que ella misma sostiene en la foto con sus manos: su tesoro durante esos meses.
Veía cómo se le iba cayendo el pelo. ¿Le entró pánico? La vida está llena de baches y no era el primero del que había que salir. Así que pánico... tampoco es eso, pero risa desde luego que no porque la alopecia no es estética y da sensación de enfermedad en el caso de que la cabeza se quede completamente o parcialmente despoblada. Independientemente de que su facultativo le comentara que eso era así y que cuando acabara el tratamiendo recuperaría el pelo, intentó que las consecuencias fueran lo menos devastadoras posibles porque en un año podía verse con la cabeza como si estuviera rapada.
¿Totalmente calva?
Existen tratamientos médicos que provocan una alopecia severa y otros que, si no tocas mucho el pelo, te deja una cantidad discreta con la que se nota que no estás bien y que tienes cuatro pelos, pero con los que se puede ir tirando. Eso le pasó a Mamá Envuelta en Crema.
Ella tomó medidas en cuanto empezó a notar la caída pero aún así, a las pocas semanas no era efectivo, sino que los pasos que siguió dieron resultado a los cuatro meses. De manera que cuando terminó su tratamiento médico (el que la mantenía con la cabellera medio notablemente despoblada), ya tenía pelo y pudo ir a la peluquería a teñirse y cortarse el pelo, ya que el que le quedaba era bastante largo.
¿O casi calva...?
Ella se tiñe de rubio, siendo castaño su color natural. Por tanto, la zona de la raíz y el poco pelo que crecía era marrón con canas y la otra mitad de la cabeza (de medios a puntas), rubia de los restos del último tinte. Cuando acabó el tratamiento médico llevaba 11 meses sin hacerse un tinte y sin cortarse ni siquiera las puntas, por lo que el aspecto parecía descuidado. ...
- Su pelo era escaso, estaba muy debilitado, se caía con tan solo rozarlo y se le formaban calvas.
- Por detrás se le veía la cabeza blanca... menudo panorama. Entonces, para salir a la calle (cuando el cuerpo se lo permitía) como el poco pelo que tenía era largo, se hacía una especie de "moñito" con unas pinzas pequeñas que no eran muy fuertes (para que no le tirara del pelo).
- No podía peinarse mucho, ni lavarse la cabeza con frecuencia, ni usar productos agresivos, ni tintes, ni cortarse el pelo... Yo le tocaba el pelo cuando le aplicaba a veces uno de los productos de los que voy a hablar y no sabía ni donde guardar los pelos que se caían para que no los viera. Me decía con la ilusión de que le contestara que no: ¿se me caen? Mientras, mi cara expresiva no sabía ni cómo gesticular porque se me abrían los ojos y cada vez estaba más perpleja porque era pasar dos dedos y un manojo fuera. No quería ni tocarle la cabeza... Pero se daba cuenta y me decía: "no me los escondas, ¿eh? que los estoy guardando". Efectivamente, se lo empezó a tomar bien e iba almacenándolos todos en un cajón. Por eso ha sido posible la foto. Lo que no voy a enseñar es foto del aspecto de su cabeza en aquel entonces porque daba penita.
Kit para recuperar el pelo
Los días que tenía fuerzas ella misma hacía visitas a la farmacia para tantear el terreno. Y fue fiándose de las recomendaciones de los farmacéuticos y luego le preguntaba al médico. Éste siempre le decía que se tomara lo que quisiera, que no pasaba nada. Hasta tal punto que este fue su kit:
1. Inneov Densiology. Anclaje y crecimiento del cabello.
- Se trata de un complemento alimenticio capilar.
- Se tomaba dos comprimidos juntos en el almuerzo todos los días durante tres meses.
- Siempre he escuchado a mis amigas decir: "no quiero pastillas por mucho que se me caiga el pelo, porque me va a salir en la cara, en los brazos... por todas partes". Pues Mamá Envuelta en Crema decía lo contrario: "se me caen solo de la cabeza". Todo el pelo de su cuerpo siguió con su ciclo habitual y empezó a tener pelo nuevo en la cabeza.
- El producto promete, de paso, solucionar el problema de las uñas frágiles y quebradizas. Esto sí que puede asegurar Mamá Envuelta en Crema que no lo cumple, ya que el tratamiento médico tenía como otro de sus muchos efectos secundarios, estropear las uñas. Quizás Inneov solucione el problema en una persona sana, pero no medicada.
- El precio era de unos 50 euros las 180 cápsulas (da para tres meses), aunque como todo dependía de dónde se comprase
2. VR6 Definitive Hair
- Se trata de otro complemento alimenticio.
- Las 60 cápsulas que daban para un mes costaban unos 30 euros.
3. Neogenic Champú Redensificante de Vichy
- Es un champú anticaída y está recomendado para personas con escaso pelo y con "caída instalada del cabello".
- Como se le caía tanto el pelo, no podía abusar de lavarse la cabeza ya que era friccionar el cuero cabelludo y empezar a caer. Y luego había que pasar por secador, ya que un resfriado no era recomendado en su estado de salud. De manera que cuando no tenía ya más remedio y se lavaba el pelo, lo hacía con este champú sin parabenes e hipoalergénico.
- Notaba el pelo limpio, medianamente fácil de peinar (aunque a veces usaba alguna mascarilla sin propiedades específicas) y con más densidad y volumen. Esto es mucho porque hablamos de muy pocos pelos.
- El bote tenía 400 ml y costaba unos 20 euros.
4. Plus Active C+U
- Es un tratamiento de uso tópico que sirve para renovar el ciclo piloso.
- Aunque no pudiera lavarse el pelo mucho, dos veces a la semana (aunque el pelo estuviera sucio) hacía lo siguiente:
-1- Mojarse el pelo y peinar cuidadosamente con un peine de púas separadas
-2- Aplicar 4 ml de este producto
-3- Masajear con la yema de los dedos pero sin frotar, es decir, había que depositar los dedos sobre la cabeza y mover los dedos pero sin despegarlos de la piel. De lo contrario, se arrancarían más pelos.
-4- Secar el pelo con el secador
- Era curioso, pero tenía zonas con calvas... nunca había visto nada igual. Y se fueron resolviendo.
- Indicaba que había que usar guantes por posibles manchas y que podía enrojecer la zona y producir picores. Pero ni manchaba ni picaba.
- Costaba unos 60 euros. Usó dos o tres envases.
5. H&S Tónico fortificante
- Cuando tocaba lavado de cabello (gran día para ella), con el pelo húmedo y después de las gotas C+U, se aplicaba este tónico.
- Son 125 ml y no llega a 10 euros.
Conclusiones:
Mamá Envuelta en Crema vuelve a tener pelo
- Algunos de estos productos pueden tener más publicidad que otros. Innov es un claro ejemplo, con los resultados clínicamente probados de los que presume, tales como que "mejora la calidad del cabello para el 95% de las mujeres, al 86% les mejora el volumen del cabello y el 78% nota el aumento del diámetro del cabello" o el dato que de que al año perdemos 35.000 cabellos. Sí, por eso quizás era lo que menos me acababa de convencer de su kit, que gozaba de demasiada publicidad. De hecho, es un producto caro y las campañas hay que pagarlas a fin de cuentas. Me preocupaba que ese hecho pudiera repercutir en resultados negativos. Pero ya haya sido su composición o el conjunto de todo el kit mostrado, el final fue feliz.
- Como en el hospital no le daban solución a la alopecia como consecuencia del uso de determinados fármacos, ella misma buscó una posible solución. Siempre le preguntaba a su médico para asegurarse de que no restara eficacia al tratamiento médico que seguía, ya que era lo realmente importante. Siempre le dijo que siguiera adelante con sus pastillas y productos para el pelo hasta tal punto que, pasados varios meses, al ver que tenía pelo le pidió que le llevara el kit para poder recomendárselo a sus pacientes.
- Ella fue muy constante y le sirvió. Pero insistimos, por si surge la duda, en que no sabemos a quién le puede ser eficaz y dudamos que a las personas que padecen algún nivel de alopecia severo (a ser completamente calvos nos referimos) o estén sometidos a una quimioterapia propiamente dicha les pueda hacer efecto. ¿Por qué? Porque hubiera sido un bombazo y ya se comercializaría, de igual manera que no existirían los implantes de pelo y todos los calvos de Europa no acudirían a Turquía para someterse a una operación que allí cuesta un 40% menos que en España.
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