Aunque los trucos de magia son cosas de magos, en la economía también hay situaciones en las que caben las artimañas, estratagemas y demás trampas. ¿Cómo convertir deuda privada en pública? Pues bien fácil. Ya explicamos en el blog cómo los bancos o instituciones financieras realizaban la compra de deuda pública en los mercados secundarios. Para ello utilizaban el ‘Carry Trade’, o lo que es lo mismo, adquirían liquidez muy barata del BCE y colocaban esta en deuda soberana de países europeos con problemas financieros. Ya está. El enorme endeudamiento privado se transformaba (y se transforma) por arte de magia en deuda pública que tienen que pagar los ciudadanos de los países afectados. Pero no queda aquí la cosa, puesto que para reunir ese montante los diferentes grupos sociales tienen que contribuir con sus impuestos. Estos impuestos proceden de las clases altas, medias y bajas, y de las empresas. Sin embargo, ¿Estos impuestos son pagados en la misma proporción por los distintos grupos sociales? No, claro. El grueso de la carga impositiva estatal recae sobre las clases medias y bajas. Por último, ¿Adónde va el dinero? Pues teniendo en cuenta que la deuda pública española roza el 100% del PIB, una gran cantidad de ese dinero va dirigido a pagar las cargas financieras y el principal de la deuda del Estado. ¿Qué queda para gastar en sanidad y educación? Poco. Sabiendo que hay que hacer frente a las partidas funcionariales, pensiones, defensa y subsidios… Como vemos, la deuda privada se convierte en deuda pública, que al final pagan los ciudadanos. Vamos, que lo de siempre. En el vídeo está mejor explicado.