Hay información muy útil en muchísimos blogs. Desde cómo portear correctamente –con el bebé mirando para el pecho–, hasta cómo tratar diversas dolencias, o qué hacer para facilitar a tus hijos la 'operación pañal'. En este blog no encontrarás una guía de crianza, ni te diré cómo educar a tus hijos. Aquí sólo te cuento humildemente cómo crío yo (y mi mujer) a los míos, y cómo vamos viviendo las distintas fases y etapas del crecimiento de nuestros padawanes. Algunos trucos que nos funcionan a nosotros, o anécdotas que se suceden una detrás de otra, ya sea por una ocurrencia de la pequeña Leia, o un logro de Luke.
Pero hoy voy a ir un paso más allá, y me voy a permitir revelaros LA GUÍA LPDG™ DEFINITIVA:
estilo 'laparejitadegolpe' en
sólo 2 pasos, y sin errores:
Paso 1. Sé feliz.
Y paso 2. Pasa todo el tiempo posible con tus hijos.
Ya está.
La felicidad se crea y se destruye, pero sobre todo se transforma, y se transmite. Es un estado altamente contagioso. No es fácil, normalmente requiere un esfuerzo, una constancia y una actitud positiva que difícilmente puede mantenerse 24 horas al día, siete días a la semana. Lo único que puedo deciros es que cuando se consigue, todo es más fácil. Y además tiene la ventaja de la retroalimentación; cuanto más feliz seas y más le trasmitas felicidad a tus hijos y a tu entorno, más recibirás de vuelta. Sólo piensa en cómo te sientes cuando te sonríen. El tiempo estrecha el vínculo y el apego. Eres el modelo, el cuidador, el maestro; pero también el acompañante, el compañero de juegos, el motivo de su seguridad y su alegría. Yo lo intento. No siempre lo consigo, pero no dejo de intentarlo. Enemigos: el estrés, la falta de sueño y el cansancio, la escasez de tiempo, la poca paciencia, la irritabilidad, la falta de conciliación... Os hacéis una idea, ¿verdad? Nuestros aliados: la empatía, el respeto y el cariño, el apoyo entre la pareja, el sentido común, la voluntad, la perseverancia, el compromiso...
Así de simple, así de complicado. Espero haberos iluminado con mi guía, como tantos otros maestros, gurús y expertos. Lástima que nuestras vidas y nuestras circunstancias no sean idílicas, no sean de guía práctica, de manual.
¡Que la Fuerza os acompañe!
P.D.: Repito para susceptibles: no es mi intención menospreciar ni criticar a nadie ni ningún estilo de crianza o modo de hacer las cosas, sino todo lo contrario. Todos –o casi todos– son válidos y respetables, cada uno hace lo que cree mejor y más conveniente para sus hijos, y todos en realidad hacemos lo que podemos. Nadie es poseedor de la verdad absoluta ni de dogmas definitivos que sirven para todos, por mucho que te los enumeren del 1 al 10.