COMO CUIDAR TUS ORQUÍDEAS
Los integrantes de la familia de las orquídeas comparten una estructura uniforme básica pero presentan una amplia variedad en aspecto y características. Existen pequeñas de apenas unos milímetros, como también grandes plantas de metros de altura.
Entre las orquídeas existen grupos, que son los 2 siguientes: terrestres Que echan sus raíces en la tierra) y epifitas Que crecen sobre otros vegetales no siendo parásito, son tropicales. Siendo estas ultimas las más populares, originarias de India, Asia, Sudamérica y Centroamérica; donde puede encontrarse en multitud de variedades más o menos grandes y todo tipo de colores, excepto azul.
En cuanto al cuidado de estas plantas, como todo ser vivo, necesitan alimentarse en especial de:
Nitrógeno: para el crecimiento vegetativo y color verde.
Fósforo: ayuda al fortalecimiento, maduración, además estimula la floración.
Potasio: fortalece las raíces, aumenta la cantidad y colorido de las flores.
Asi mismo, requieren de dosis más pequeñas que las indicadas por el creador/fabricante, lo ideal es aplicar un cuarto de la dosis recomendada. Todos los fertilizantes deben aplicarse después del riego, pues de lo contrario se pueden quemar las raíces.
Fertilización según la especie
– Catleya, sophronitis, brasasvola: florecen y luego entran en reposo, en ese momento debes suprimir el riego, sólo pulverizar la planta. Cuando empiezan a brotar las hojas se debe empezar a abonar con moderación.
– Phalaenopsis: regar con el fertilizante incluído, cada 15 días o una vez a la semana. No se pulveriza la planta.
– Oncidium: necesita poco abono.
– Cymbidium: se debe regar y al día siguiente fertilizar, de noviembre a enero.
– Dendrobium: debe descansar antes de florecer. Florece por lo general cuando bota las hojas. Cuando deja de crecer debe suspender el abono y el riego.
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