Como Cultivar el Calabacín y las Calabazas Ornamentales

Octubre es el mes de la calabaza, la creciente aceptación de la festividad de Halloween en nuestro país, ha hecho que este fruto se convierta en un elemento lúdico y decorativo. Aunque no es un cultivo muy recomendable para el huerto urbano debido a sus necesidades de espacio, merece la pena que lo conozcas, pues tampoco es imposible cultivarlo.

Calabazas de Halloween
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La calabaza y el calabacín

La calabaza (Cucurbita maxima) y el calabacín(Cucurbita pepo) son plantas de la familia de las cucurbitáceas, grupo de plantas caracterizadas por tener grandes frutos, llamados pepónides, de una gran variedad de formas y compuestos de una cubierta dura y resistente y un interior blando y acuoso. Entre los miembros de esta familia además de las calabazas, están el melón, el pepino o la sandía.

Las calabazas presenta una acusada variedad de formas en sus frutos, debido a la cierta facilidad para generar cultivares distintos a partir de la hibridación con otras especies silvestres muy cercanas. A la calabaza se le supone origen americano, aunque el calabacín ya era conocido en Europa en la edad antigua. No hay que confundir estas calabazas (g. Cucurbita) con la calabazas de peregrino, usadas tradicionalmente como recipiente y flotador, pues pertenece a otro género distinto (Lagenaria)

De las calabazas y Se consume su fruto y también su gran flor que es cada vez más apreciada en la gastronomía.

Flor del calabacín
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Cómo cultivar calabacines

El calabacín no es demasiado exigente en temperaturas, aunque sí que lo es en agua, debido a su gran masa foliar, algo a tener en cuenta a la hora de planificar nuestro huerto urbano. El agua es el factor que más puede limitar el cultivo, pues tiene cierta resistencia a crecer en suelos pobres o inadecuados. También es una planta que necesita de bastante iluminación para poder llegar a producir sus frutos.

El cultivo suele hacerse por siembra directa en primavera, sembrando dos o tres semillas, para después deshacernos de las que sobran, hasta dejar sólo una planta, normalmente la de mayor vigor. Si queremos obtener calabazas para Halloween habrá que retrasar algo la siembra, (dependiendo de las temperaturas) para que no fructifiquen demasiado pronto.

El calabacín necesita de grandes marcos de plantación; por ejemplo de 0,50×0,50m a 1x1m o más, pues su crecimiento rastrero va a acabar ocupando mucho espacio. Para ello se suele recurrir al entutorado, normalmente con alambre de jardinero sobre una malla rígida que facilita las labores, la iluminación y aprovecha mejor el espacio.

Las flores necesitan ser polinizadas por abejas, esto es importante en el huerto urbano, pues a veces en las grandes ciudades no es tan fácil encontrarlos, por lo que habrá que suplirles polinizando nosotros las flores hembras con un pincel fino. Las calabazas como otras cucurbitáceas son monoicas, es decir, una misma planta tiene flores macho y hembra, y suelen tener mecanismos para evitar la autofecundación, así que será recomendable tener al menos dos plantas.

Las calabazas ornamentales

Estas bonitas calabazas que a finales de octubre llenan las fruterías y floristerías, nos asombran con su aspecto tan curioso que parecen artificiales. En realidad son cultivares de calabacín y calabaza, cultivados únicamente por su valor ornamental y su pequeño tamaño, y aunque pudiesen ser comidos, realmente no merecería la pena, pues no son lo más adecuado para eso y suelen ser amargas dada su elevada cantidad de cucurbitacina (la misma sustancia que hace amargar los pepinos). Sin embargo, aunque no se coman, es un bonito regalo y en el huerto también puede haber sitio para flores y frutos decorativos.

Normalmente estas calabazas se pueden adquirir en sobres de semillas en los que se suelen mezclar las variedades para poder tener mas surtido de formas y tipos de ellas. Sin embargo, la alta capacidad de hibridación de la calabaza, hace que se crucen entre ellas, pudiendo llegar a hibridarse con calabazas comestibles llegando a estropear la cosecha al volverlas amargas e incluso tóxicas, si se utilizan semillas de cultivos anteriores. Lo más recomendable es separar lo suficiente las diferentes especies, o si no es posible, sólo cultivarlas de un tipo, o comprar semillas certificadas.

Calabazas ornamentales
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Plagas y enfermedades

Las calabazas y calabacines son sensibles al ataque de la araña roja y las mosca blanca, también a diversas enfermedades fúngicas y bacterianas provocadas por exceso de humedad y sobre todo por falta de ventilación, además de que pueden aparecer deformaciones en los frutos causados por cambios bruscos de temperatura.

Así que ya lo sabes, si sigues estos consejos, quizá el próximo año puedas hacer tus propias calabazas de Halloween.