La vestimenta de los cristianos ─principalmente el de la mujer─ es uno de los temas más comentados en la actualidad. Unos condenan el uso del pantalón y otros alaban al uso de la falda. Se han armado muchísimas disputas por este tema, y cada quién en su propio bando defendiendo con dureza lo que cree.
Hoy en este artículo vamos a conocer un poco acerca de la verdad de este tema. ¿Seré salva al usar pantalón?¿Soy santa aun usando falda? Como siempre haremos uso de la Biblia para respaldar cada punto que tocaremos. No es obligado que creas en lo que diré, tu tomas la decisión.
Cuando se habla del tema al respecto muchos señalan rápidamente al Libro de Deuteronomio 22: 5, empezaremos entonces haciendo una comparación con versiones más entendibles.
La Reina Valera 1960 dice:
"No vestirá la mujer traje de hombre, ni el hombre vestirá ropa de mujer; porque abominación es a Jehová tu Dios cualquiera que esto hace."
La Nueva Traducción Viviente dice:
"Una mujer no debe vestirse con ropa de hombre, y un hombre no debe vestirse con ropa de mujer. Cualquiera que hace algo así es detestable a los ojos del Señor tu Dios."
"La mujer no debe usar ropa de hombre, ni el hombre debe usar ropa de mujer, porque al Señor le repugna todo aquel que hace estas cosas."
Este verso hace referencia directamente al uso de la ropa del hombre y la mujer, y se cree que el énfasis está puesto en la homosexualidad. El hombre y la mujer debían demostrar siempre por su vestimenta el género al cual pertenecían; su vestimenta debía de hacer clara esta distinción. Al no vestir el hombre o la mujer de acuerdo a su género sugería que existían inclinaciones homosexuales en la persona, y esto constituía en sí mismo un acto que era abominable ante los ojos de Dios. " No te echarás con varón como con mujer, es abominación." [Levítico 18:22]
Hoy en día no es muy complicado distinguir a un homosexual por su vestimenta. Ellos ─mujeres y hombres─ tienden a vestir de manera que no les corresponde a su sexo de nacimiento. Pero aun así, los hombres y mujeres deben vestir de manera apropiada, reflejando a Cristo en todo aspecto.
Aunque la Biblia no hace mención especifica en cuanto al tipo de moda o estilo que se ha de usar, sí da ciertas reglas o principios que se deben seguir al vestir. Si leemos en 1 Timoteo 2:9-10 estos principios son:
→ DECORO: Comportamiento adecuado y respetuoso correspondiente a cada categoría y situación.
→ PUDOR: Vergüenza de exhibir el propio cuerpo desnudo o de tratar temas relacionados con el sexo. La calidad o estado de ser propio (apropiado); conforme a lo que es socialmente aceptado en conducta o palabra; temor a ofender las reglas convencionales de la conducta, especialmente entre sexos; (En nuestro caso la sociedad y las reglas de conducta cristianas)
→ MODESTIA: Humildad, falta de vanidad y no ostentación de los propios méritos.
"Y quiero que las mujeres se vistan decentemente, que se adornen con modestia y sencillez, no con peinados exagerados, ni con oro, perlas o vestidos costosos. Que su adorno sean las buenas obras, como corresponde a las mujeres que quieren honrar a Dios." [1 Timoteo 2-9-10 ─ DHH]
Podemos deducir ─por lo que nos dice el versículo─ que en aquel tiempo las mujeres no vestían adecuadamente. Estas mujeres ─igual que las de hoy─ se vestían de manera que pudieran llamar la atención del sexo opuesto. Otras mujeres ─quizá─ de la clase más alta buscaban mostrar sus riquezas y poder a través de los vestidos lujosos y las joyas.
Fue el caso ─como el de hoy─ que esas prácticas habían llegado a la iglesia de aquel tiempo, y las mujeres iban vestidas de manera inapropiada. La iglesia es el lugar para adorar a Dios y no para exhibir modas.
Si nos pudiéramos remontar a los tiempos de la iglesia primitiva, nos encontraríamos que todos, hombres, mujeres y niños, estarían vestidos con batas hasta el suelo o hasta la rodilla. Un soldado Romano Cristiano como lo era Cornelio, estaría vestido con una falda (saya) corta, al alto de la rodilla, y todo esto sin causar ningún escándalo. Si tratáramos de imponer esta costumbre en América en la era en que vivimos, un hombre vestido con una bata o falda corta, llamaría mucho la atención y fuera causa de escándalo en la iglesia, en la calle o donde quiera que fuera.
Entonces, ¿es pecado en una mujer usar pantalón? ¡No! Hay una gran diferencia entre el pantalón de un hombre y una mujer. El corte precisamente. Lo que concierne a este estilo de vestimenta, es que la mujer debe vestir de acuerdo a los principios que mencionamos arriba: El de ser decorosos (apropiado y de buen gusto), con pudor (apropiada, aceptable de una mujer cristiana, que no sea sexualmente provocativa) y con modestia ( libre de orgullo, pretensión y vanidad) especialmente cuando se asiste a la casa de Dios.
Como cuestión de orden y respeto a la casa de Dios, es mi opinión y creo que la de muchos otros, que la mujer debe asistir a la iglesia vestida con traje o falda y no con pantalón, lo cual seria mas apropiado para el trabajo o el parque. La manera en la que se van vestidos a la casa de Dios deja mucho que decir acerca de lo que sentimos por aquel lugar, ¿lo respetamos o no?.
Y de pronto cuestiones esto que escribo y digas: ¿la mujer así vestida provoca deseos pecaminosos en los hombres? Y yo te respondo: no necesariamente el problema se debe a una mujer vestida provocativamente, el problema también está en nosotros los hombres. Si un hombre tiene la mente sucia mirara a una mujer vestida decorosamente de manera provocativa. El hombre y la mujer cristianos deben de ser disciplinados para mirar y pensar en las cosas correctas. [Filipenses 4:8]
Ya culminando debo aclarar que en el verso 10 de 1 Timoteo 2 es una exhortación a las mujeres a no estar tan preocupadas en su apariencia física como ya mencionamos, sino que debían estar vestidas de buenas obras, como corresponde a mujeres que profesan la piedad. Las mujeres cristianas, que profesan piedad, deben ser caracterizadas, no por sus adornos externos y ostentosos vestidos y joyas, sino por sus buenas obras, es decir una vida donde el centro de atención sea Cristo y no ellas. Y ustedes, ustedes que gastan tiempo discutiendo por este tema, preocúpense más bien de que su vida sea recta delante de Dios y de los hombres, preocúpense por todos aquellos que se están perdiendo sin Jesús.
Le dejo estas palabras que el Apóstol Pedro también habla sobre al respecto:
"Que el adorno de ustedes no sea de cosas externas, como peinados exagerados, o con joyas de oro y vestidos lujosos. La belleza no depende de las apariencias, sino de lo que hay en el corazón. Así que, sean ustedes personas tranquilas y amables. Esta belleza nunca desaparece, y es muy valiosa delante de Dios." [1 Pedro 3:3-4 ─ TLA]
Locutor y Blogger cristiano. Amante de las producciones Audiovisuales, el social media y el cine. Un apasionado por la presencia de Dios que motiva a otros a amar a Jesús. Escritor colaborador en el Colectivo Anormal.