Aunque no existe un consenso sobre el momento ideal para quitarlo, generalmente se recomienda la retirada del chupete en torno a los 2 años de edad. Su uso continuado más allá de esta edad podría dar lugar a alteraciones dentarias como la mordida abierta o la mordida cruzada.
Por eso tenemos que armarnos de paciencia e imaginación a la hora de quitar el chupete. Aquí van algunos trucos e ideas:
- Si usa mucho el chupete, tanto de día como de noche, puedes reducir poco a poco su uso. En situaciones donde preveáis que puede pedirlo, intenta distraerlo con otras actividades.
- Ve preparándole: antes de que llegue el día ve explicándole que "ya es mayor" y que deberá dejar el chupete. Puedes leerle algún cuento relacionado con la idea para que sepa qué es lo que va a pasar y cómo se va a sentir.
- Sé creativa y busca una excusa divertida para dejarlo: quizá haya nacido algún bebé en la familia. Es el motivo perfecto para "regalar" todos los chupetes al nuevo miembro de la familia; Si coincide en Navidad, dejárselo a Papá Noel o los Reyes Magos; Pagar con chupetes un juguete nuevo...etc. Cualquier idea es buena, y cuanto más divertida, y más implique al niño, mejor. Después habrá algún momento en que el niño eche de menos el chupete. En ese caso debéis recordarle lo sucedido y no volver atrás.
- Sustituid el chupete por otra alternativa: si lo usa para dormir por ejemplo, podéis establecer otras rutinas como leer un cuento, cantar una nana, acompañarle de un peluche u otra figura de apego.
- Si se enfada o llora por no tener el chupete, no le riñas ni le grites por ello. Tampoco lo compares con otros niños. Acompáñale en el proceso desde el respeto. Sé paciente y comprensivo.