Como elegir el mejor producto de desinfección para la piscina

Publicado el 02 abril 2016 por Milnoticias @MilNoticiasSEO
Tener una piscina en nuestro hogar o nuestra comunidad requiere de mucho más que seleccionar el material, el diseño y echar agua. En una piscina ingresan de forma diaria residuos o bacterias que poco tienen que ver con el baño y que han de ser eliminados. El objetivo de la desinfección es eliminar todos los microorganismos que se encuentran presentes en el agua y de esta forma asegurar que cualquier patógeno que entre sea también rápidamente inactivado o eliminado. 
Esto implica que el agua además de estar totalmente desinfectada, debe ser desinfectante. Para conseguir esto se pueden utilizar varios métodos. 

- Productos Clorados 
El cloro es el desinfectante más conocido. Tiene varias variantes, pero principalmente dos: el cloro líquido o las pastillas multifunción para piscinas. Ahora bien, ¿Cuál elegir? 
- Cloro líquido 
Tiene una serie de inconvenientes con respecto a las pastillas multifunción para piscinas: 
- Su transporte se realiza mediante una especie de bombonas que tienen bastante peso. 
- Si la piscina se encuentra muy expuesta al Sol, el cloro líquido se consume mucho antes que las pastillas. 
- Cloro en pastillas 
Tienen cloro estabilizado con ácido cianúrico para que de esta forma aguante mucho más y por lo tanto la vigilancia que se necesita sobre el agua sea menor. Además, las pastillas multifunción para piscinas se disuelven lentamente, por lo tanto se dosifican así mismas. Ahora bien, tienen varios efectos negativos: 
Cuando hay un nivel bajo de concentración, el hecho de añadir más pastillas de cloro no conlleva un gran aumento de su estabilidad. A partir de un nivel muy grande de ácido cianúrico, resulta peligroso para la salud. 
Aparte de todo esto, tanto el cloro en pastillas como el cloro líquido tienen un problema, pero para evitar cualquier problema puedes comprar un tratamiento sin cloro piscina . Una de sus principales acciones es eliminar a los gérmenes, ya que actúan como agente desinfectante e inmediatamente después comenzar a quemarlos u oxidarlos mediante su acción oxidante. 
Sin embargo, si el cloro no posee la concentración apropiada, su acción oxidante puede empeorar considerablemente y no quema totalmente a los gérmenes, sino que crea unos compuestos intermedios distinguidos como cloro combinado o cloraminas, las cuales le dan un mal olor al agua e irritan la piel y los ojos.