Cómo elegir la mejor mascarilla para el rostro

Por Lanena @virginiaELB

Mi profesora de belleza siempre decía: “La piel es muy rencorosa, te lo dirá todo a la cara en el peor momento, cuando falte la juventud.”

Por eso me metió muy internamente en la cabeza la importancia de cuidarse adecuadamente a cada edad. Escuchando lo que nos dice la piel en cada momento para saber sus necesidades. Y eso es lo que intento inculcaros a vosotr@s 

Hoy hablaremos de cómo elegir bien la mascarilla para el rostro. Las mascarillas están dentro de grupo de cuidados complementarios de la piel junto con los sérums, exfoliaciones, peelings, …

Todos ellos son tratamientos puntuales o de refuerzo de acuerdo a la necesidad de la piel en cada una de las etapas de nuestra vida. Por eso hay infinidad de tipos de mascarillas.

Las mascarillas hidratantes: Ayudan a retener el agua. Ideal para pieles deshidratadas que necesitan un plus de vez en cuando.

Mascarillas efecto lifting: Alisan. Ideales para pieles maduras. Actúan reafirmando el contorno del rostro ayudando a combatir los signos del envejecimiento.

Mascarilla relajante/antiestrés: Relajan. Combaten los signos de fatiga. Ideal para pieles sensibles.

Mascarilla purificante y limpiadora: Purifican, es decir, regulan la secreción sebácea y limpian en profundidad. Ideales para pieles grasas y mixtas.

Mascarilla revitalizante: Revitalizan, nutren, regeneran e iluminan la piel. Ideal para pieles apagadas y/o maduras.

Mascarilla “peel-off”: Belleza inmediata, es decir, con efecto de ampolla flash.

Y seguro que me dejo alguna. Como veis es un producto que puede cubrir un amplio abanico de necesidades. Será fácil encontrar la mascarilla idónea para tu necesidad en este momento.

Para conseguir que las mascarilla trabaje de la forma más óptima posible debemos limpiarnos el rostro antes. Elegir la mascarilla y el efecto adecuado a nuestro tipo de piel. Y terminar con nuestro ritual de belleza, cualquiera que sea. Secuencia de después de la mascarilla: Tonificar, contorno de ojos e hidratar, por ejemplo.

Puedes utilizar las mascarillas una vez a la semana, además combinan a la perfección con las exfoliaciones. Un ejemplo de combinación satisfactoria sería exfoliar nuestra piel para quitar las células muertas y luego utilizar una mascarilla revitalizante para aportar un plus de luminosidad. Ideal para pieles maduras o pieles apagadas.

Las mascarillas proporcionan en pocos minutos los beneficios que sólo podrías conseguir con meses de tratamiento. Son productos fáciles de aplicar, son rápidas y bastante asequibles porque duran bastante.

Además se pueden utilizar en cualquier momento, de día o de noche. Las mascarillas hidratantes se pueden utilizar como crema de noche cuando notes que tu piel se ha quedado muy deshidratada ese día. Por la mañana te la quitas con la limpieza de tu rutina diaria.

Importante no aplicar nunca la mascarilla facial sobre el cuero cabelludo, el contorno de los ojos, los párpados y los labios. Para estas zonas hay mascarillas específicas con las características de esa zona de la piel en concreto.

Yo he probado una de esas mascarillas peel off de una gama de farmacia. La mascarilla facial hidratante y nutritiva Genomask con Vitamina C y Ácido Hialurónico y efecto flash. Su precio está sobre los 10€. Contiene ocho sobres para ocho mascarillas.

Según el fabricante:

Genomask está específicamente formulado para facilitar la formación del colágeno y así mantener una piel joven, tersa y elástica. Contiene Vitamina C ciclodextrinada, de este modo llega intacta a su lugar de acción. Su función es mantener al hierro en una forma reducida (Fe2+) para facilitar la transformación de tropo-colágeno en colágeno. También contiene Ácido hialurónico, una sustancia que actúa como esponja dando un aporte extra de agua a la piel manteniéndola más hidratada. Y extracto de quinoa (Chenopodium quinoa), rico en Vitamina E que tiene un elevado poder antioxidante, cuyo papel es importante para evitar el envejecimiento y para pieles dañadas ayudando a mejorar la hidratación y reconfortando la piel.

Lo que yo he notado:

Esta mascarilla es muy agradable. Como su textura es gelatinosa aporta frescor cuando te la pones y relaja mucho. Así que me creo que calme la piel y la regenere después de tomar el Sol, tal y como dice el fabricante.

Eso sí, ponérsela con las manos es un poco engorroso pues no consigues controlar bien el producto. Hay que poner una capa de producto por todo el rostro, evitando labios y contorno de los ojos.

Yo propongo que si tienes una brocha de esas del tinte o de aplicar maquillaje líquido que no sea muy nueva (pues no sé si quedarán restos), vaciemos el sobrecito en un recipiente y lo coloquemos con la brocha. Seguro que no desperdiciamos producto y lo podemos extender bien por el rostro y controlando la cantidad.

Una vez que está colocada sólo hay que esperar entre 20 y 30 minutos. Yo esperé 25 min. ala!  Después puedes quitártela como si fuera una segunda piel. De ahí que las llamen “peel off Cuando me la quité note la piel muy suave con una textura muy rica y fresquita.

Una vez que te la quitas pondremos nuestros productos de tratamiento diario, es decir: tonificar, contorno de ojos e hidratar.

A mí me ha gustado esta mascarilla pues tiene un precio muy asequible, deja la piel muy confortable y con un tacto muy rico. Además he notado ese plus de luminosidad que comenta el fabricante. Ahora bien, el efecto no dura mucho aunque la piel se queda bien, pero por ese precio ¿qué quieres? Y también es verdad que esta mascarilla tiene efecto flash, eso quiere decir que no es de tratamiento sino que es más bien para reavivar la piel en un momento dado o cuando necesitas un plus para un evento o momento puntual. Yo la sigo teniendo en casa para esas ocasiones

¿Te gusta utilizar mascarillas? ¿Utilizas mascarilla periódicamente? Cuenta, cuenta…