Lo estamos viendo estos días más que nunca, cuando aprueban tasas e impuestos a las clases medias y bajas, y no sólo no tocan a las grandes fortunas, sino que además les bajan los impuestos como aquí en Marmolejo. La derecha no cree en lo público, ya lo comprobamos con Aznar cuando privatizó las grandes multinacionales que daban los máximos beneficios al Estado, y ahora lo vemos con Cospedal con la privatización de hospitales. Cualquier sector público es una oportunidad de negocio para los empresarios, y eso bien lo sabe la derecha.
La educación pública y la sanidad pública universal peligran, la ley de la dependencia ya no es un derecho, la renta de emancipación tampoco, las becas de estudio de idiomas se reducen a la mitad...y los estudiantes que se manifestaban por el corte de la calefacción en sus aulas, terminaron calientes, pero calientes a palos por la policía violenta mandada por el gobierno valenciano.
ESA ES LA DERECHATÚ DECIDES