Mucho hemos hablado aquí del día a día de los ciclistas profesionales, de sus rutinas y el porqué de las mismas, pero... ¿qué sucede con sus vidas una vez que el hastío o el paso del tiempo los empuja a colgar la bicicleta? ¿Cómo se afronta una situación así y a qué da paso? En estos días que tanto se viene hablando del adiós de uno de los grandes, como es Alberto Contador, vamos a dar un repaso a esta situación.
Muchos son los que coinciden en que el primer detalle que impacta a un reconocido ciclista profesional tras su retirada es el paso de ser un personaje mediático, a engrosar la lista de individuos anónimos. Algo que sucede en una gran mayoría de deportistas. En ocasiones estos profesionales han vivido en esa burbuja desde una edad muy temprana, lo que provoca que el choque sea aún mayor.
El siguiente paso es... ¿y qué hago ahora? Tras las primeras semanas o meses en las que se disfruta a lo grande de ese espacio de tiempo que anteriormente se añoraba para dedicar a la familia, los amigos y el ocio, llega el momento en que uno se plantea que eso no siempre será así. Por un lado, todo el mundo necesita de algún modo sentirse ocupado; por otro, en la gran mayoría de los casos no se tiene la vida económicamente resuelta y toca buscarse de nuevo un medio de subsistencia.
Una gran parte de estos deportistas buscan salir adelante tratando de seguir vinculados al ciclismo y aunque obviamente no hay lugar para todos, son numerosos los que lo consiguen. Solo hay que echar un vistazo a los equipos profesionales de ciclismo para percatarse de que en gran medida están poblados de ex-corredores. José Miguel Echavarri y José Luis Jaimerena son dos ejemplos al frente del Movistar Team que, si bien no alcanzaron su máxima fama pedaleando, lo hicieron en sus años mozos. También junto a ellos un Eusebio Unzué que no fue más allá de competir en pruebas juveniles.
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Pero son muchos más los que fueron estrellas de este deporte y siguen ligados a equipos profesionales en su dirección, caso de Giuseppe Saronni, Bjarne Riis, Erik Zabel, Noël Dejonckheere, Fabio Baldato. Otro grande como Bernard Hinault forma parte actualmente de la organización de Tour de Francia.
Si llevan adelante un buen trabajo de marketing, algunos privilegiados pueden llegar a vivir de su imagen o al menos hacerlo por un buen tiempo. Joaquim Rodríguez ejerce de embajador del equipo Bahrain-Mérida. Alberto Contador continúa con sus compromisos publicitarios mientras se implica a fondo con su Fundación, que a su vez se hace cargo de la gestión de sus equipos junior. También lo hará a partir de ahora del equipo continental bajo el patrocinio de Polartec-Kometa, un proyecto de desarrollo del Trek-Segafredo que tendrá al de Pinto al frente, además de a su amigo y ex-compañero Ivan Basso en la función de team manager.
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Pero no todos los ex-ciclistas eligen seguir vinculados a su deporte. Un caso singular es el del ganador del Tour de Francia 2006, Óscar Pereiro. Tras su retirada en 2010, el polifacético gallego dio un salto fugaz al fútbol fichando por el Coruxo CF que disputaba la liga española en Segunda División B. Posteriormente se dedicó a los rallyes, primero como copiloto y después como piloto, llegando a participar en alguna prueba del campeonato de España. También demostró su talento con el póker participando y logrando victorias en el programa de Antena 3 TV "Estrellas en Juego", lo que le permitió llegar a competir con profesionales al clasificarse nada menos que para un torneo satélite del European Poker Tour de Barcelona, el circuito europeo de PokerStars que en cada edición reunía a los mejores profesionales del mundo. Actualmente ejerce como comentarista en radio y televisión durante algunas pruebas ciclistas, y como tertuliano en el programa deportivo del canal Mega, El Chiringuito de Jugones.
No deja de ser menos curioso el caso de otro de los grandes personajes del ciclismo mundial, Miguel Indurain. El "Extraterrestre" sigue siendo un tipo tan sencillo como cuando ponía patas arriba el Tour de Francia. Fiel a su estilo parece huir de los focos y del protagonismo y dedica en Pamplona gran parte del tiempo a su Fundacion que ayuda a deportistas de élite. Su vida parece transcurrir tranquila y discreta acompañado de su familia mientras se ocupa de sus negocios y algunos temas publicitarios. El mejor ciclista español de todos los tiempos aun disfruta de la bicicleta casi a diario, aunque ya sin aquella "enfermiza obsesión" por destrozar todos los cronómetros.
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A diferencia de Miguel, otro de los ciclistas más mediáticos de nuestro país nos acompaña de forma regular muchas de las tardes de cada verano, deleitándonos con sus comentarios y sus anécdotas. Pedro Delgado, ¿quién sino? El de Segovia ha sabido sacarle partido a su carácter afable y su desparpajo para instalarse de forma casi perpetua en las retransmisiones ciclistas de TVE y Teledeporte. Hoy en día es difícil imaginar una Vuelta a España o un Tour de Francia sin escuchar de fondo las historias del gran Perico. Sin duda uno de los ciclistas más carismáticos de nuestro país.
Otro aspecto en el que algunos ciclistas -los menos- han puesto sus ojos para salir adelante tras la retirada, es en el mundo de la representación. Sin duda, el mejor exponente en esta faceta es Ángel Edo. El de Gavá parecía tenerlo muy claro incluso antes de poner fin a su etapa sobre el sillín, ya que casi al instante de bajarse de la bici en 2007, contaba en sus filas nada menos que con Purito Rodríguez y Pablo Lastras. Posteriormente su proyecto iría tomando cuerpo al tiempo que adquiría una reputación que le acercaba más deportistas. Por la agencia KEC Pro Sport que dirige el propio Edo han ido pasando nombres tan relevantes como Pereiro, José Joaquín Rojas, Haimar Zubeldia, Javi Moreno, Ángel Vicioso, Dani Moreno, Jonathan Restrepo, Egoi Martínez, Alberto Losada, Markel Irizar, Mauricio Soler o Beñat Txoperena, entre otros muchos. Todo indica que son numerosos los profesionales que prefieren poner su futuro en manos de otro ciclista.
Estas son algunas de las alternativas que eligen los profesionales de la bici en el momento de retirarse, aunque siempre hay alguien que decide romper la pauta, tanto durante como en el desenlace de su carrera. Éste podría ser el reciente caso del estadounidense Andrew Talansky que recientemente sorprendía a todos anunciando una prematura retirada a sus 28 años. No hay que olvidar que el corredor del Cannondale, natural de Miami, fue 5º en la Vuelta a España 2016 y 11º en el Tour 2015, además de vencedor del Critérium del Dauphiné 2014. Ahora Talansky sorprende de nuevo al anunciar que va a optar por el triatlón y que su objetivo es un Ironman. Ahí es nada.
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Andrew TalanskyComo podemos deducir en todo este recorrido, hay opciones para todos los gustos. Eso sí, siempre que se den las condiciones adecuadas y que encajen con el estilo de cada persona. Pero es cierto que tras alimentarnos de las decisiones de estos profesionales que un día decidieron dejar de lado el deporte al que aman, sólo nos queda aceptar una evidencia: que hay vida después de la bicicleta.