Es impresionante la cantidad de mujeres que nos negamos en redondo a dejar de tomar el sol por más que los daños sean evidentes. Sabemos que el fotoenvejecimiento es el daño solar acumulado en las células de la piel después de tantos años de exposición solar, pero lo que no asumimos es que el 80% del envejecimiento que vemos en nuestro rostro se debe al sol. Ahora imagínate eliminar de tu rostro (haz como las famosas y usa Photoshop ) las arrugas profundas, la piel engrosada, las manchas y las asperezas. Fuerte, no?
El envejecimiento cronológico es mucho más lento en aparecer y desde luego es más benévolo porque te da una piel delgada, traslúcida, suave y con líneas de expresión más finas (sólo las de la felicidad
Para que veas (ahora sí, simulado) como hubiera sido la vejez de este caballero sin daño solar (conocido como daño actínico), echa un vistazo a la primera fotografía abajo. La segunda representa su situación si el daño solar se hubiese producido en todo el rostro por igual. ¿A que adivino qué tipo de envejecimiento elegirías?
Bueno, pues ni con esas. Nosotras erre, que erre. Y es que pensamos que estamos más guapas morenas, y lo que es peor, pensamos que estamos más delgadas morenas. Argggg!!
Señoras, lo de delgadas deben comprobarlo con su báscula, pero que yo sepa, peso lo mismo antes de tomar el sol que después, y lo de más guapas, mmmmmm, va a ser que no por los motivos expuestos arriba. Lo que si puede ser es que nos gusta más como destaca el blanco ibicenco de nuestro vestido sobre la piel torrada, pero para eso hay opciones como tomar el sol responsablemente consiguiendo un tono gradual, autobroncearse o usar maquillajes fantásticos en tonos dorados que se limpian por la noche y no envejecen.
Como la fotoprotección solar no es perfecta (no aplicamos la cantidad suficiente, o no lo hacemos las veces suficientes, o no usamos el SPF adecuado o ... mil contratiempos), podemos añadir una protección extra para evitar que la cara y el escote se vean seriamente dañados: un sombrero de playa. Si, ya se que lo usaban nuestras abuelas, pero antes de que digas ni mu, mejor mira la selección que te traigo. Dime si no te gustaría este look para ti en la playa, ¡si casi parece que va a aparecer el capitán de tu yate para ofrecerte un cóctel!. Auténtico glamour al alcance de tu bolsillo. Y de lo más fashion!
Pero si no te he pillado a tiempo para , aún estás a tiempo de suavizar los efectos de ese sol, pues hay productos cosméticos capaces de reparar los daños (aunque no olvides que siempre será más fácil reparar pocos daños que muchos, por lo que el uso del fotoprotector siempre es y será la primera acción de debes realizar)
En general nuestro cuerpo es capaz de reparar el daño actínico que se produce sobre el ADN por si solo. Sin embargo, si la cantidad a reparar es excesiva o si por la edad hemos perdido esa capacidad de reparación, es necesario enviar desde el exterior a un buen fontanero que repare y reordene los daños provocados en la estructura del ADN. Para ello, puedes elegir entre diferentes categorías de fontaneros ( endonucleasas, exonucleasas o fotoliasas) según sus métodos de trabajo - unos cortan y pegan y otros se unen a la fiesta calmando al personal-, pero para trabajar, antes hace falta que lleguen a su destino y eso no podrán hacerlo a menos que tomen un taxi especial y de ultimísima generación como los ultrasomas (sólo tienen servicio de noche), fotosomas (sólo trabajan de día), roxisomas o liposomas ( tipo
Aquí te dejamos TRES productos (fotoprotector, aftersun y serum) con fontanero y taxi incluido para reparar el ADN de tus células maltratadas.
¿Los conocías? ¿has probado alguno? Cuéntanos los resultados