El otro día vi especialmente atento al Sr. Alcolea con el programa "del Jordi", Salvados creo que se llama... hablaban de conciliación, que debe ser un tema tabú en vuestro país porque las redes sociales echaban humo y el Muy y su santa debatían como si fueran novios sin el cansancio que resulta de las responsabilidades que traen los hijos.
El energúmeno se quedó sopa en el sofá y a media noche se levantó para irse a la cama. En el pasillo le abordé con el correspondiente grito ahogado de un tipo miedoso al que no le gustan los sobresaltos:
Gretzky: Oye Alcolea, esto de la conciliación, de la que todos habláis, ¿en qué consiste?
Yo: Básicamente en adaptar los horarios laborales de los padres con la necesidad de disponer de un tiempo mínimo para criar y educar a los hijos.
G: En mi Polonia natal este debate no tenía sentido, en los años 60 estaba claro que la mujer tenía que encargarse de esas tareas.
Yo: Ya, pero la sociedad avanza Gret, y con ella la mujer se ha ido incorporando al mercado laboral surgiendo un nuevo modelo de familia mayoritario en el que ambos progenitores trabajan.
G: Los hombres como yo trabajábamos en dos sitios para llevar el pan a casa. Yo lo hice en una mina de sal en turno de mañana y reparando pequeños desperfectos por las tardes… eso sí, sin cotizar, “a lo mediterráneo”. El problema ahora está en que lo queréis todo: dos autos, dos televisiones lo más finas y curvas posibles, canales de pago, viajes, restaurantes… todo por ser más y mejor que el de al lado.
Yo: Si he de serte sincero no me atrevo a quitarte la razón en esto último que comentas.Pero esa lectura no justifica el resto Gret, yo tengo una hija y un hijo y me preocupa que Little Ana sigue partiendo en desventaja laboral con respecto al Lil´Dani.
G: No acabo de entenderlo…
Yo: Es sencillo, si yo hago una entrevista de trabajo a dos candidatos igual de preparados, estando ambos en edad de ser papás, escogeré al hombre pues me aseguro que no va a faltar 16 semanas en un momento dado.
G: Pues que le den de manera obligatoria 8 semanas a la madre y 8 al padre, ya está. Ambos parten con la misma “desventaja”... que tiene cojones Alcolea, que no os da.
Yo: Mmm… ya, ¿y qué me dices de la posibilidad que tienen en Suecia de quedarse con los hijos en casa cuando están malos? ¡Pagado por el Estado! Estaríamos todo el día de baja por este motivo con tal de no ir a trabajar
G: Pon un sistema de bajas como el de la seguridad social pero para hijos, y que las guarderías, si fuesen públicas, contrastasen que el niño no ha acudido.
Yo: Es que lo ves todo muy sencillo…
G: Un amigo mío me dijo una vez que a menudo el camino más corto es, sencillamente, el camino adecuado.
Yo: No sé si las horas a las que mantenemos esta conversación son muy normales Gret, los niños están dormidos y les vamos a despertar.
G: Pues les vuelves a dormir, mira tú que problema.
Yo: Eres un cachondo, como a ti las horas de sueño no te suponen problema alguno. Por cierto, y ya para acabar, hay un problema al que, de verdad, no le encuentro solución: en una empresa pequeña en que un trabajador coge una reducción de jornada por cuidado de hijos deja al empresario sin empleado a última hora de la tarde. ¿eso cómo lo solucionas? ¿contratando a alguien por 2 horas? Sabes de sobra que te va a dejar tirado en cuanto encuentre un trabajo con mejores condiciones.
G: Pues ahí me coges en fuera de juego, en Suecia dicen que llaman a jubilados, no?
Yo: Eso no te lo crees ni tú.
G: Es verdad, eso no se lo cree nadie.
Joder Gret, venga que no son horas, que mañana hay que currar y luego tengo que llevar a la niña a la piscina, hacer la cena, la comida del día siguiente...
G: Eso te pasa por blando, qué manía os ha dado con ayudar en casa
Yo: La culpa la tienen mis padres, que no me han enseñado otra cosa que no sea compartir las tareas.
G: Es que la educación, por desgracia, es el origen de todo.
Yo: La educación debe ser el punto de partida para encontrar la solución, eso es así. Buenas noches, Gretzky.
G: Dobrywieczór,Alcolea.