Introducción al artículo: En este artículo se explica de forma básica lo que es y como funciona un inversor a red, y los usos que se le pueden dar a este aparato.
Artículo entero: Un inversor a red, es básicamente un inversor, o sea, un aparato eléctrico o electrónico que lo que hace es pasar de una tensión continua de 12, 24 ó 48Vcc, que se genera mediante unos captadores de energía renovable, a una tensión alterna de 220-230Vac, igual a la que ya tenemos en nuestra instalación, y que proviene de la red eléctrica. Los captadores de energía renovables normalmente son placas solares fotovoltaicas, pero también pueden ser aerogeneradores, o captadores de algún otro tipo de fuente de energía renovable. El funcionamiento básico de un inversor a red es el siguiente: - El inversor detecta que tiene tensión continua proveniente de la captación de energías renovables y con esto ya puede pasar al siguiente paso. - El inversor mide si hay tensión alterna (230Vca) en nuestra instalación eléctrica proveniente de la red eléctrica. Sino es así, corta la generación de energía eléctrica de 230Vca. El inversor a red solo puede generar energía e inyectarla a nuestra instalación cuando ya hay tensión en ella. - El inversor genera una tensión igual a la existente en nuestra instalación e inyecta amperios de corriente en ella para nuestro consumo.
El inversor a red se usa normalmente para lo que se denomina como autoconsumo eléctrico, aunque también se pueden usar como forma sencilla de ampliación de generación eléctrica, en instalaciones aisladas donde ya poseemos de una instalación de generación eléctrica basada en captación de energías renovables. Con el autoconsumo, lo que conseguimos es que si en nuestra instalación eléctrica tenemos un consumo constante de unos 400W, podemos generar mediante energías renovables esos 400W para así no consumirlos de la red eléctrica, y por tantos ahorrarnos ese consumo en nuestra próxima factura eléctrica.
Normalmente para el autoconsumo eléctrico se utilizan captadores solares, o paneles solares fotovoltaicos, ya que el consumo constante normalmente se debe al uso de iluminación en un local comercial o en oficinas, y solo están funcionando durante del día. Independientemente de esto, en una vivienda también se puede usar este sistema, aunque actualmente en la mayoría de los casos es más difícil de amortizar una instalación de este tipo, ya que normalmente los consumos de energía eléctrica no se concentran en las horas de posible generación. Lo comento porque actualmente no existe una legislación (en España) que haga una compensación en el recibo eléctrico, de tal manera que lo que se genere durante el día y no se consuma se pueda consumir durante la noche (consumiendo energía de la red eléctrica). Esto tendría que ser así ya que durante las horas de producción, sino hemos consumido toda la energía producida, la hemos entregado a la red eléctrica para que la consuman otras personas.