Sin embargo, el problema surge cuando queremos iniciar nuestro negocio propio, pero no tenemos suficiente dinero o capital como para crear uno.
Si consideramos que éste es nuestro caso, no debemos desanimarnos, pues debemos tener en cuenta que existen algunas formas de iniciar un negocio propio con buen potencial de rentabilidad, sin necesidad de tener que invertir mucho dinero en su creación.
Son formas de iniciar un negocio que han sido explotadas en los últimos años por personas que han llegado a obtener grandes sumas de dinero (llegando en muchos casos a amasar una fortuna), y que en sus inicios contaban con poco o casi nada de dinero.
Aunque también, cabe destacar que muchas personas que utilizaron estas formas de iniciar un negocio, fracasaron, pues no contaban con algunos requisitos indispensables para alcanzar el éxito, tales como la paciencia, la dedicación y la perseverancia.
Veamos a continuación cuáles son estas formas de iniciar un negocio propio con buen potencial de rentabilidad y con poco requerimiento de capital.
Ventas
Una forma no tan sencilla de iniciar un negocio propio, pero accesible para la mayoría de personas, son las ventas.
A través de los años, las ventas les han permitido a millones de personas iniciar su camino hacia la riqueza, en muchos casos, personas que al principio contaban con poco o casi nada de dinero.
Para iniciar y tener éxito con un negocio relacionado con las ventas, debemos procurar vender un producto de calidad, de preferencia un producto único o novedoso, que satisfaga alguna necesidad en los consumidores, que mejore la calidad de vida de las personas, que realmente les sea útil a los demás.
Puede ser un producto que nosotros mismos creemos o fabriquemos, por ejemplo, algún producto alimenticio que podamos elaborar en casa.
Puede ser un producto que compremos para luego venderlo, por ejemplo, un producto que podamos conseguirlo a un precio bajo (por ejemplo, al comprarlo al por mayor, o al comprarlo en algún determinado mercado), y que luego podamos venderlo a un precio mayor.
Puede ser un producto que podamos mandarlo a producir o fabricar, por ejemplo, prendas de vestir a las cuales les pongamos nuestra propia marca y luego las vendamos al por mayor a las tiendas o bazares.
Puede ser un producto que compremos para luego arreglarlo o mejorarlo, por ejemplo, algún vehículo usado que podamos arreglarlo y luego venderlo.
Puede ser un producto que podamos vender al afiliarnos a algún negocio multinivel, puede ser un producto que podamos vender por Internet, etc.
Empezar a vender puede ser una tarea difícil, sobre todo si el mercado al cual queremos apuntar está saturado y nadie nos conoce.
Sin embargo, en el caso de que el mercado esté saturado, la forma de entrar en un mercado así es ofreciendo un producto de calidad, que sea único, que sea novedoso, que sea diferente, que llame la atención de los consumidores.
En el caso de que nadie nos conozca, podemos empezar vendiendo a comisión, dejando nuestros productos en negocios que se encarguen de ofrecerlos al consumidor final, y que nos vayan pagando a medida que ellos vayan vendiendo.
Enseñar lo que sabemos
Otra forma de iniciar un negocio propio con poco dinero consiste en enseñar aquello que sabemos, aquello en lo cual tenemos conocimientos y experiencia.
Para ello, no es necesario que seamos expertos en algún tema, simplemente basta con compartir con entusiasmo aquello que sabemos tan bien, a la vez que poco a poco vamos aprendiendo cada vez más en el proceso.
Tampoco es necesario contar con mucho dinero, basta con instalar un taller, oficina, academia o escuela en casa, o, incluso podemos empezar a enseñar a través de internet.
Por ejemplo, si contamos conocimientos sobre finanzas personales, podemos escribir y vender algún libro, guía, manual o ebook.
Si tenemos experiencia en marketing o ventas, podemos instalar una pequeña academia o escuela en casa, o brindar algún curso sobre el tema.
Si nos consideramos buenos para el baile, podemos instalar un taller o academia de baile en casa.
Si nos consideramos buenos para alguna disciplina, igual, podemos dar clases en casa, o brindar clases particulares a domicilio.
Si nos consideramos buenos en algún deporte, por ejemplo, nos consideramos buenos para el ping pong, podemos crear una página web, y vender a través de ella, cursos o videos didácticos sobre el tema.
Enseñando aquello que sabían es la forma en que muchas personas iniciaron sus propios negocios con poco dinero; las claves están en compartir con entusiasmo aquello que sabemos, en tratar de ser realmente de ayuda para los demás, en aprender en el camino, en llegar a ser nosotros mismos nuestra propia marca, y en llegar al mayor número de consumidores posibles.