Es totalmente posible, y lo lograrás sin ningún truco de velocidad de lectura, los cuales pueden ser malos para absorber realmente la información.
¿Sigue pareciendo mucho? No, no es imposible. Si necesitas leer un libro para mañana por la escuela, o porque te lo prestaron y lo regresas mañana pero no has ni empezado, o simplemente por cuestiones de tiempo, esto es para ti.
Leer un libro entero en un solo día puede sonar imposible, pero hagamos cuentas. El adulto promedio lee entre 200 -400 palabras por minuto. Una novela consta, en promedio, de entre 60,000 y 100,000 palabras. Si tu velocidad de lectura es promedio (digamos 300 palabras por minuto) y estás leyendo una novela de, digamos 80,000 palabras, serías capaz de terminarla en 5 horas o menos.
Encuentra el lugar perfecto
La distracción es tu enemigo. Cualquier cosa que desvíe tu atención de tu libro incrementará el tiempo que necesitarás para terminarlo. El internet, sonidos, televisión, juegos, mascotas, amigos, etc. Sepárate del mundo por un momento. Enciérrate en tu cuarto con un par de audífonos, encuentra el lugar más inhibido de tu casa. Piensa cuánta soledad necesitas e intenta conseguir el doble. Cuando menciono usar audífonos me refiero a unos que bloqueen sonido o reproduce sonido blanco en ellos, eso te ayudará a mantenerte concentrado, y por lo tanto, leer más rápido.
También es importante encontrar un lugar donde estés cómodo, pero no tanto como para quedarte dormido. Lee en una mesa en lugar de tu cama, o una silla con cojín.
Lee en intervalos y mantente activo
Cuando te concentras por mucho tiempo en una sola tarea comenzarás a experimentar agotamiento, tu energía mental y auto control decaerán. Si no tomas breves recesos, tu motivación para seguir leyendo desaparecerá. Así que, a menos que el libro esté increíblemente interesante, eventualmente te cansarás de leer, y necesitarás despejarte un poco.
Coloca un temporizador y lee 20 minutos, después realiza algo activo que te mantenga con energía por unos 5-10 minutos. Da una caminata, realiza tus ejercicios del día, juega un videojuego o escucha algo de rock pesado, lo que te funcione. La idea es darte un descanso para regresar a leer con energía y refrescado.
Toma notas de todo
Tomar notas sobre lo que lees, sobre frases o párrafos que quieras recordar te ayudará a romper la monotonía y a retener más información. Anota todo. Palabras que no conozcas, lo que lees entre líneas, las motivaciones de los personajes, pensamientos y cómo te sientes emocionalmente con los giros argumentales.
Algunos puntos que pueden ayudarte son los siguientes:
- Clasifica el libro de acuerdo al tema
- Menciona de qué trata el libro, tan breve como sea posible
- Enlista tus partes favoritas
- Define el o los problemas que el autor trata de resolver
Si anotas esto ahora mientras está fresco en tu mente no tendrás que tratar de recordarlo después con tu mente cansada y hayas olvidado algunas cosas. Puedes realizar esto cuando hayas terminado o mientras lees.
Date gasolina si lo necesitas
Tal vez suene tonto pero, probablemente llegue un punto cuando tus actividades para estar activo no funcionarán tan bien como al principio y no te levantarán. Utiliza una de las drogas favoritas del mundo, la cafeína. Algunos puntos a considerar:
- No empieces tu lectura con una bebida con cafeína, a menos que sea absolutamente necesario. Guárdala para cuando realmente la necesites, “no uses el nitro antes si quieres ganar la carrera”.
- Poco azúcar. Un poco de azúcar para tu bebida está bien, pero muchas bebidas tienen mucho, si cometes esté error al principio te levantarás pero cuando el azúcar y la cafeína decaigan lo harán al mismo tiempo, dándote un gran bajón.
La comida es importante también, la necesitarás para mantener tu mente funcionando correctamente y con gasolina. Algunos tips:
- Nada de comida grasosa, puedes ensuciar las páginas
- Algo que se pueda comer sin mirarlo
- Algo que se pueda comer con una mano
Cambia tu teléfono por tu libro
Si estás pensando que no tienes 5 horas para dedicar a la lectura en un día, tengo noticias para ti: probablemente lees más de eso. De acuerdo a un reciente estudio, la persona promedio pasa aproximadamente 5 horas al día en su teléfono. La mayor parte de esa interacción es una lectura de noticias, Facebook, Twitter, citas en línea, No Creas Nada. Así que, cambia el teléfono por el libro.
Si puedes permitírtelo deja tu teléfono en casa o mantenlo en silencio o modo avión. Aplica lo mismo para tablets, TVs, laptops, etc. Recuerda que estás en modo de lectura de emergencia, así que necesitas recuperar todos esos minutos. En caso de que tu libro esté en tu teléfono o tableta puedes usarlos, pero trata de mantener el modo avión.
Incorpora audiolibros
Incorpora a tus oídos al juego, es otra forma de ganar más tiempo para la “lectura”. Por ejemplo, puedes leer un par de horas, descargar el audiolibro y continuar donde lo dejaste mientras manejas, mientras haces compras, ejercicio, para posteriormente regresar a la lectura. Por supuesto, esto depende de la disponibilidad del audiolibro.
No hagas de los maratones de lectura tu pan de cada día
Antes de comenzar, recuerda que los libros no están hechos para leerse en un día. Igual que las telenovelas están divididos en episodios para consumir gradualmente. Relajarte y tomarte tu tiempo siempre será mejor para más comprensión. Leer un libro en un día debería ser tu última opción.