Mayo 2013
Plaza & Janés
384 Pág.
17.90€
Es muy posible que Bronte, una chica guapa, inteligente y ambiciosa, siga con tanto interés los vaivenes de la familia real británica para olvidar sus propios fracasos sentimentales. Para superar su última decepción amorosa, decide centrarse en su exitosa carrera de publicista. Pero un día, entre los atiborrados estantes de una librería, conoce a Max Heyworth, un hombre muy atractivo con un marcado acento británico.Max está en Estados Unidos completando un posgrado y solo le quedan tres meses para terminarlo, así que Bronte decide disfrutar de una aventura corta y sin ataduras. Sin embargo, cuando Max tiene que volver a Inglaterra antes de lo previsto, no puede evitar declararle su amor a Bronte... Y por si fuera poco, ella no tarda en descubrir que su pretendiente no es ni más ni menos que ¡el hijo del decimoctavo duque de Northrop!Todas las alarmas se disparan en la cabeza de Bronte: ¿será capaz de superar su pánico al compromiso? y... ¡más difícil todavía!: ¿será capaz de superarlo con un apuesto heredero inglés?
Hace unos meses se nos presentaba a una nueva autora, Megan Mulry con la publicación de esta novela.
No sabía muy bien que esperarme pero que fuera de un duque y encima en la actualidad me llamaba bastante la atención.Cómo ligar con un duque me ha gustado mucho, no tanto por la historia que es bastante previsible y llena de tópicos pero si por los personajes y su mundo interior.
En las novelas románticas siempre me suelo enamorar más de él protagonista que de ella pero lo cierto es que en esta ocasión me ha pasado al contrario.
La relación con Max comienza de una forma casual y encantadora, entre los libros de una maravillosa librería. Sin embargo entre ellos no hay más que atracción y ganas de pasarlo bien. Se prometen que su relación tendrá un principio y un final establecido sin embargo no contaban con enamorarse.
Bronte se comporta con Max de una forma fresca y desenfadada y sin duda es una de las cosas que más me han gustado de la historia. No se amilana ni cambia su forma de ser por lo que es Max, por su posición en la aristocracia.
La relación entre ambos está marcada por los conflictos, y la poca comunicación en algunas ocasiones. Bronte no confía en que los sentimientos de Max sean duraderos y eso hace que este pierda la paciencia.
Ambos chocan continuamente, Max es la certeza, el amor incondicional desde el primer momento. Bronte en cambio es la duda, la desconfianza, el querer amar pero no querer sufrir y ello hace que nos encontremos con escenas muy emotivas.
A parte de esto conoceremos a la familia de Max, la tensa relación que existe con su madre y el amor que siente hacía sus hermanos.
Cómo ligar con un duque es una novela desenfadada y sencilla con la que pasar un buen rato. Con unos personajes cercanos, escenas entrañables y mucho amor.
Estoy deseando leer la próxima novela de la serie, Cómo conquistar a un lord, tocará conocer a Devon hermano de Max, un personaje divertido y terriblemente conquistador.