Este post es parte de un esfuerzo con Mott's de Puerto Rico para resaltar la importancia de que los ninos tengan un buen comienzo en la vida.
Lograr que nuestros hijos tengan un buen comienzo en la vida debería ser una de nuestras prioridades como padres. Todos los expertos en el mundo han coincidido que la base de todo está en la etapa temprana. Esa en la que nuestros peques comienzan a conocer, descubrir y alimentarse de todo lo que existe a su alrededor.Es importante enfatizar que, entre más hagas con ellos y por ellos ahora, mejores probabilidades tendrás que se conviertan en adultos exitosos. Y cuando digo “exitosos” me refiero específicamente a que sean gente de bien, con mentes y metas claras, educados, con principios y lo suficientemente fuertes como para saber enfrentar la vida y todo lo que llega con ella. Ojo, no se trata de ser “padres perfectos” sino de hacer lo que esté a nuestro alcance para que lo logren.
Por eso me motiva tanto esta campaña de los buenos amigos de Mott’s de PuertoRico. Ellos están enfocados en llevar el mensaje de que todo comienza ahora y que tú como mamá o papá puedes hacer mucho más de lo que imaginas para que tus hijos comiencen bien.
Comienza bien: 17 formas de contribuir
Para mí, esta es la mejor forma en que puedo contribuir para unirme a este mensaje. Aquí te comparto lo que yo considero que es mi aportación como mamá para que mi hijo tenga un buen comienzo en la vida.
- Enséñale a ser responsable con él, con sus semejantes y su entorno.
- Nutre su espíritu.
- Haz todo lo que esté a tu alcance para estar presente en su vida, no solo en los “buenos momentos” sino en aquellos en los que en realidad te necesita.
- Diviértanse juntos.
- Dale una buena educación y buen ejemplo.
- Corrígelo a tiempo.
- Demuéstrale que todos somos iguales, evita los prejuicios.
- Dale confianza.
- Enséñale principios y modales para que pueda desenvolverse.
- Involúcrate y participa activamente en sus actividades favoritas.
- Ofrécele una buena alimentación.
- Permite que pase tiempo de calidad con otros miembros de la familia, como con sus abuelos, por ejemplo.
- Edúcalo para que valore lo verdaderamente importante.
- Ayúdalo a desarrollar sus habilidades exponiéndolo a diferentes experiencias.
- Celebra sus logros.
- Aliéntalo a tener metas y sueños que cumplir.
- Alimenta su corazón con amor, compasión y empatía.
Y tú, ¿cómo contribuyes a que tus hijos tengan un buen comienzo?