Cómo mantener buenos hábitos cuando estás "en modo supervivencia"

Por Pegotiblog

Si has pasado alguna temporada en modo supervivencia, como le llamo, reconocerás en seguida la situación: son esas temporadas en el que tu día a día es un caos, y te sientes, precisamente, así, que no vives, sino que sobrevives como puedes.
Por ejemplo, durante una mudanza, donde tus jornadas de trabajo acaban en una casa llena de cajas con miles de cosas por hacer.
O tras la llegada de un bebé, donde las horas de sueño brillan por su ausencia.
O en un periodo muy apretado de trabajo, donde las jornadas se hacen maratonianas y no paras por casa.
Esas épocas donde el tiempo libre escasea, y las tareas habituales se van acumulando, por falta de tiempo (o fuerza) para realizarlas.
Si has pasado por una época así, sabrás lo complicado que es, además, trabajar en tus objetivos. Si no te da tiempo a recoger los platos ¿cómo vas a sacarlo para estudiar ese curso al que estás apuntada? o ¿de dónde vas a sacar fuerza para ir al gimnasio, si te pasas cargando cajas y montando muebles horas?
No tienes por qué abandonar del todo tus objetivos, si no ajustarlos de forma temporal.
  • Redefine lo que es productividad para ti. Si durante un buen momento, un día productivo  implica realizar 5 tareas de tu lista, por decir algo, durante una temporada en modo de supervivencia puede ser simplemente realizar 1 de las tareas. Es decir, reducir la lista para poder avanzar, aunque sea paso a paso.
  • Crea una lista de "tareas ya realizadas": es muy fácil dejarnos llevar por el ajetreo y no ser conscientes de todo lo que vamos haciendo durante el día, sobre todo en cuanto a tareas de mantenimiento o rutinas. Como motivación, y para evitar la frustración de tener la sensación de no haber hecho nada, crea una lista de cosas que has hecho (te sorprenderás)
  • Dale una vuelta a tus prioridades. En esas épocas en modo supervivencia, toca reajustar qué es lo realmente prioritario, para centrarnos el poco tiempo que tenemos en aquello que realmente nos va a aportar valor o ser útil. Revisa tu lista de tareas y aparca algunas de ellas. Si intentas ir a por todo, es fácil que te agobies pensando en la cantidad de cosas por hacer.
  • No intentes hacer todo a la vez. Céntrate en un objetivo o área de tu vida en la que quieres trabajar, cada día (o cada semana). Ve al "mínimo" para avanzar, pero sin sobrecargarte. Ya vendrán mejores tiempos para poder centrarte en más temas.
  • Minimiza tus rutinas: Busca no complicarte, e ir a lo básico que te permita salir adelante. Por ejemplo, yo estoy haciendo del peinado moño un básico en mi look y un maquillaje mínimo, para estar lista en 5 minutos, porque ese tiempo lo necesito para apañar a mi bebé por ejemplo. Mi rutina de la mañana se ha simplificado mucho, de esta manera.
  • Define cuáles son tus básicos en el día a día. Crea una lista de aquellos hábitos y tareas que no deberían faltar en tu jornada, los que son básicos. La mayoría de ellos, sonbre todo el épocas de modo supervivencia serán del ámbito del autocuidado (lavarte los dientes, comer tus raciones de fruta y verdura, hacer la cama) pero puedes tener cualquiera, según cada uno. Leer, deporte, recoger la cocina, preparar la mochila...  Al final estos básicos son los que te permiten sobrellevar estos periodos de agobio y estrés, y te dan estabilidad (física, mental, emocional). Tampoco hagas una lista eterna llena de ideales. Céntrate en 5, por ejemplo. 

Si no se te ocurren, o te salen demasiados en la lista, aquí tienes una serie de preguntas que pueden ayudarte a analizar mejor la situación:
  • ¿Qué básicos estás echando en falta en tu vida, ahora mismo? ¿estás sufriendo de alguna manera por no tenerlos?
  • Si tuvieses que elegir solo un básico, para trabajar en él ¿cuál sería? ¿cómo podrías empezar a ponerlo en práctica? Elabora un plan de acción (pequeñas metas intermedias, y acciones que puedes realizar para llegar a ellas)
  • ¿Hay algo que te encante -cualquier cosa- para lo que no has podido sacar tiempo en los últimos meses? ¿cómo podrías trabajar para volver a incorporar ese "algo" que te encanta, en tu vida?
Al final, no se trata de abandonarlo (y abandonarte) por completo, si no reajustar tus prioridades y tiempos, de forma provisional. Rebajar el estrés que nos puede causar tener una lista interminable de tareas todos los días, nos ayudará a  afrontar esos periodos que, ya de por sí, son más estresantes.
Photo by Robert Bye on Unsplash
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