Gracias a un sencillo truco, podremos conseguir que Windows 7 trabaje más rápido quitando esas animaciones y efectos.
Para ello, pulsaremos “Inicio” y en el cuadro de búsqueda escribiremos SystemPropertiesPerformance, cuando aparezca en la lista, lo pulsamos.
Si después de activar la mejora, quieres volver a tener los efectos visuales, no tienes más que desmarcar la casilla.