Tener unas vacaciones de ensueño es, probablemente, uno de los grandes deseos de quienes laboran. Apartarse del trabajo cotidiano para descansar; dándole la oportunidad al cuerpo y la mente para que se regeneren, recuperando las fuerzas invertidas en el trabajo que le permite el sustento.
De hecho, todas las personas deberían tomar unas merecidas vacaciones. En donde pueda desconectarse de la realidad laboral y se sumerja un proceso de renovación personal.
A todo esto, no siempre es posible tener las vacaciones que deseamos. Esto por diferentes razones, sin embargo, uno de los factores que tiene mayor incidencia en esto es el dinero; ya que por lo general nuestras expectativas superan nuestras capacidades económicas; por lo tanto, tenemos que conformarnos con momentos de esparcimiento que, aunque no son decepcionantes, no suelen satisfacer el deseo de tener unas vacaciones de ensueño.
Por otro lado están las personas que sí las tienen pero luego que pasan, ahogados(as) por los compromisos de deudas asumidos, es como si ese tiempo de esparcimiento se lo haya llevado el viento, por el estrés generado por las obligaciones financieras a las que tiene que dar cuenta.
En ese sentido, queremos responder a la pregunta de cómo planificar unas vacaciones de ensueño sin tener que lamentarlo. En donde ofreceremos algunas pautas que debes tomar en cuenta para llevar a cabo un proyecto como este, en donde, literalmente, el centro de todo es tu descanso y disfrute personal, antes, durante y después de tomarlas.
Es probable que algunas personas disfruten el hecho de que tienen un tiempo libre, pero quizás no midan la importancia de las vacaciones en su vida. Vacacionar es un asunto que, más allá de un derecho es algo que tiene que ver con tu salud física y emocional.
Un estudio realizado en la Universidad Estatal de Nueva York en Oswego a más de 12,000 hombres de entre 35 y 57 años permitió sacar algunas conclusiones. La evidencia científica señala que si las personas no se toman al menos una semana de vacaciones al año, se incrementa en aproximadamente un 30% el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca.[1]
Pero esto no se supedita al tema cardíaco, sino que se expande a lo emocional; de hecho, tomar vacaciones es de suma importancia para mantener el equilibrio físico y mental, que a la vez repercute positivamente en el rendimiento laboral.[2]
Por lo tanto, más allá de un derecho laboral es un aspecto que debemos cubrir, y hacerlo de manera regular, porque coartarnos de este derecho/necesidad/beneficio es hacernos daño a nosotros mismos. Sin importar el nivel de responsabilidad que manejes en tu labor diaria.
Existen personas, principalmente hombres, que aluden a que no toman vacaciones porque tienen mucho trabajo. Enviando el mensaje de que son imprescindibles en sus empresas o empleos, lo cual es un error; porque la vida continua, con o sin esa persona. De hecho, estudios demuestran que cuando la persona no descansa, sino que se mantiene constantemente en una dinámica laboral, llega a un puno en donde deja de responder de manera adecuada a la demanda de trabajo que tiene en frente.
Teniendo como resultado el desgaste físico y mental, pero además que su objetivo de ser "productivo(a)" no llega a cumplirse, por lo tanto, estuvo arando en el mar.
Es por esta razón que es importantísimo que tomes vacaciones. Porque ellas te permiten hacer un cambio de chip y renovar tus fuerzas para que entonces tengas un mejor desempeño en tu área de trabajo.
Tomando en consideración la importancia capital que tienen las vacaciones en tu salud física, mental y emocional. La pregunta que surge es ¿Cómo planificarlas?
Para esto vamos a ofrecerte una serie de pautas bien puntuales, que puedas llevar a cabo para lograr tener tus vacaciones de ensueño, sin tener que esforzarte tanto, sin deudas y con la gratificación de que vas a descansar sin preocupaciones.
Pauta No. 1: Tomate tu tiempo
Lo que debe primar en este proceso es el tiempo. Cuando armas tus vacaciones rápidamente, por lo general no las disfrutas. Todo es rápido, tienes que armar una serie de cosas en un tiempo mínimo y esto tiene como resultado que pases cosas por alto, se te olviden otras y no tomes en cuenta otras tantas.
Por lo tanto, y dada la importancia de las vacaciones, es prudente que te tomes tu tiempo para armarlas, en donde puedas identificar lo que realmente quieres hacer, a dónde quieres ir, con quien las vas a compartir, etc.
Esto es sumamente importante, porque en la medida en que te tomas el tiempo adecuado entonces verás cómo el resultado será altamente gratificante, teniendo como consecuencia que logres extraer el máximo de tu tiempo de descanso.
En ese sentido pudieras preguntarte ¿ Cuánto es el tiempo apropiado para planificar las vacaciones?
La respuesta a esa pregunta entra dentro del marco de lo relativo. Como hemos dicho en otras ocasiones, cada caso es particular, y decir de manera tajante que debe ser "X" o "Y" tiempo pudiéramos caer en un error garrafal. Sin embargo, en la generalidad de los casos, y basados en nuestra experiencia, el mínimo de tiempo que debes tomar para planificar tus vacaciones es seis meses.
Si lo haces de esta manera, a nuestro criterio, entendemos que podrás tener éxito. Aunque en nuestro caso en particular, nos gusta hacerlo al menos con doce meses de anticipación. Porque, desde nuestra perspectiva, es el tiempo ideal para tener claro qué es lo que queremos y cómo lo vamos a lograr.
Pauta No. 2: Define y planifica el tipo de vacaciones que quieres tener
Existen varios tipos de vacaciones, están las que se pasan en casa, las que implican visitar a un familiar dentro o fuera del país, viajar y conocer a otros países, irse de crucero, etc.
Cada una de las vacaciones tiene sus implicaciones, por ejemplo, si deseas irte de viaje y conocer un país distinto al tuyo, entonces debes saber que algunos países requieren de visados o permisos de entrada para acceder a ellos, por lo tanto, esto de por sí representa una limitante, y debes trabajar en función de cuáles son esas cosas que tienes que observar.
Y esta es una de las razones por las que sugerimos que el tiempo que tomes para planificar tus vacaciones sea de seis meses a un año. Porque con ese tiempo, tienes la capacidad de abordar de manera efectiva todos esos detalles del tipo de vacaciones que quieres tener.
Pauta No. 3: Crea un fondo para tus vacaciones
Como dijimos al principio, aunque existen varios factores que inciden para que nuestras vacaciones de ensueño no se materialicen, sin duda alguna, el elemento dinero es uno de los que tiene mayor peso en todo esto. Y la razón es simple, para vacacionar se necesita dinero.
Es por esto que te sugerimos que hagas un fondo especial para tus vacaciones, en donde apartes las porciones necesarias para solventar esos días de desconexión laboral. Y con esta pauta, retomamos la importancia del tiempo. Ya que quien se planifica en el tiempo que sugerimos entonces tiene altas posibilidades de ahorrar el monto necesario para lograr su meta vacacional.
Y en ese mismo tenor, no es recomendable asumir una deuda para este fin. Independientemente de las ofertas que puedan aparecer, endeudarse es endeudarse. Y hacerlo implica un compromiso que por lo general involucra intereses, por lo tanto, tu tiempo de descanso se puede convertir en un problema. Teniendo que enfrentar esos compromisos que asumiste.
Por lo que, es mejor que te planifiques y apartes con tiempo ese dinero que vas a necesitar y así evitarte posibles dolores de cabeza asumiendo compromisos innecesarios de deuda, que al final del día, te pueden complicar la vida.
Pauta No. 4: Gasta todo lo que dispusiste para tus vacaciones
Luego de todo esto, proponte no traer un solo centavo de lo que dispusiste en tus vacaciones. Varias personas en mi consulta suelen llevar a cabo todas pautas antes mencionadas, y luego de salir de vacaciones generar sentimientos de culpabilidad a razón de que lo han hecho tan bien, y no tienen ningún tipo de compromiso financiero que les da pena gastar ese dinero.
Pues te dejo saber que eso es un error. ¿Por qué? Porque no es saludable. No se estas creando valor a tu vida. Si has logrado con tu esfuerzo tantas cosas, es porque te lo mereces, y debes disfrutarlo.
Por lo que, si dispusiste un dinero para vacacionar, entonces vacaciona con ese dinero. Esto no significa que tienes que gastar por gastar, o buscar en qué gastarlo sin sentido; lo que esto quiere decir es que te debes manejar sin la restricción mental de que tienes que volver con dinero.
Todo lo contrario, debes liberarte y disfrutar de todo el esfuerzo acumulado durante esos seis meses a un año. No te cohíbas de ir a tal o cual lugar por pensar que tienes que volver con dinero, o que puedes utilizarlo en otra cosa "más productiva", eso no te ayuda al balance de tus finanzas y te impone un límite innecesario a tu tiempo de descanso.
Tomar vacaciones es una acción relajante que debes tomar muy en serio. Apartarte durante un tiempo para que tu cuerpo, mente y espíritu descanse y renueven sus fuerzas. Teniendo pendiente que debes hacerlo con tiempo, definiendo y planificando el tipo de vacaciones que quieres tene r, creando un fondo para solventarlas, disfrutándolas sin la restricción mental de que tienes que volver a casa con un dinero que puedes utilizar en otra cosa.
Te podemos asegurar que tu cuerpo, mente y espíritu te lo agradecerán.
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[1] Artículo: No tomar vacaciones puede ser malo para la salud Consultado 5/24/16
[2] Artículo: Importancia de las Vacaciones: Equilibrio físico y mental Consultado 5/24/16