Una de las frases que más escucho, en general, en mi vida, es ¿cómo llevas tan bien todo lo que tienes encima? Mi vida tiene muchas piedras en el camino, desde la repentina muerte de mamá, mi enfermedad crónica con mi movilidad reducida y la dependencia de papá con su enfermedad... Cuando cuento cómo es mi día a día de hospitales y demás, todo el mundo me mira con pena o siempre dicen compungidos "cuánto lo siento", pero yo siempre, siempre contesto "no te preocupes, si lo llevo fenomenal, soy súper feliz", y todo el mundo se extraña, siempre parece raro que puedas ser feliz teniendo determinadas desgracias o problemas en tu vida, pero sí, yo me siento cada día muy, muy feliz. Y creo que en la gratitud está una de mis mejores claves para serlo. Me siento tan agradecida por todo lo bueno que tengo (que, a pesar de todo lo malo, tengo muchísimas cosas buenas en mi vida), por todas las oportunidades que tengo cada día a nivel personal y profesional, toda la gente que me quiere y me ayuda y, por supuesto, todo lo que mi equipo médico hace por mí, que esa práctica de la gratitud es la que me hace sentirme tan feliz y positiva siempre. Este tema me parece vital y súper importante, y por eso hoy quiero hablaros de ello de la mano de Ixi Ávila, coach experta en Inteligencia Emocional.
Según explica Ixi, la gratitud es un sentimiento complejo que se produce cuando percibimos que hemos recibido algo positivo en nuestras vidas. Algo que nos ha sido dado gracias a las acciones de otras personas o a la vida misma. Todas las personas nos sentimos agradecidas en algunos momentos. Sin embargo, lo que se busca con la práctica de la gratitud es convertirnos en personas agradecidas, generando una mentalidad que se centra en el agradecimiento: "Si nos paramos a observar, hay muchas razones por las que podemos sentir agradecimiento. Para empezar, el hecho de que nuestro corazón lata es un regalo que nos ha sido dado, no hemos tenido que trabajar duro para lograrlo. Tenemos un corazón latiendo y trabajando a nuestro servicio 24 horas al día y la mayoría de personas lo damos por hecho e infravaloramos la suerte que tenemos".
Ixi Ávila ofrece estas pautas para empezar a introducir la práctica de la gratitud en nuestras vidas:
¿Cómo podemos comenzar la práctica de la gratitud?Al principio puede que no te salga de forma natural agradecer, porque no has entrenado tu atención para que se focalice en todas las razones que hay para agradecer. La coach recomienda dos ejercicios para comenzar:
1. Diario de Gratitud
Puedes empezar la práctica de gratitud escribiendo. Por ejemplo, antes de dormir puedes escribir en el diario entre 3 y 5 razones por las que sientes agradecimiento por ese día. Uno de los errores más comunes a la hora de realizar este ejercicio es que se convierte en una especie de 'lista de la compra' donde cada noche enumero las mismas razones por las que se supone que debería sentir agradecimiento, pero no conecto emocionalmente con nada.
Ej: Agradezco tener salud, tener a mi familia, tener una casa, etc. Son cosas importantes pero no estoy conectando con el sentimiento de agradecimiento. Por eso, algo que suele funcionar muy bien es concretar. Cuanto más específica sea la práctica de agradecimiento, más fácil será sentir la emoción. Ej: Agradezco ese comentario que me ha hecho hoy mi pareja que me ha ilusionado, agradezco ese paseo que me he dado al sol, ese momento de descanso en el que he podido parar a meditar unos minutos, tomarme un té calentito y recargar las pilas, etc.
2. Carta de Gratitud
Otro ejercicio que tiene muchos beneficios es poner la gratitud en práctica con los demás. A menudo, cuando agradecemos, lo hacemos de forma muy generaliza: 'Gracias por todo' y tampoco nos paramos a conectar desde la vulnerabilidad. Por eso, recomiendo el ejercicio de la carta de la gratitud.
La idea es que conectes con una persona hacia la que sientas agradecimiento. Piensa en las acciones que esa persona tomó para enriquecer tu vida y escribe una carta en la que especifiques todo lo que sientes. Una vez que la tengas, y en la medida de lo posible, la idea es entregarla en persona y leerla en alto. Esto tendrá un efecto muy positivo tanto en la persona que lo recibe como en ti.
¿Cuáles son los beneficios de la práctica de la gratitud?Cada vez hay más estudios que demuestran que la práctica de la gratitud tiene muchísimos beneficios.
- Nos ayuda a apreciar y a valorar el presente.
- Se magnifican las sensaciones de bienestar y satisfacción.
- Fortalece el sistema inmunológico.
- Aumenta la resistencia al estrés.
- Mejora la calidad del sueño.
- Aumenta nuestra compasión y generosidad.
- Reduce sentimientos de soledad.
- Nos ayuda a perdonar. A menudo se dice que es el pegamento que mantiene a las personas unidas.
Aunque yo personalmente no hago estas prácticas escritas, siempre, cada día las reviso mentalmente, en mi cabeza, y me sienta de maravilla. Si crees que la práctica de la gratitud puede ayudarte en tu vida o es lo que necesitas para cambiar a mejor, toma nota y empieza desde ya a trabajarla, ¡te aseguro que te encantará la experiencia!