Los gemelos (también llamado gastrocnemio) son uno de los músculos que más sufren cuando montamos en bicicleta. Es muy habitual, sobre todo en rutas largas, sufrir sobrecargas en este músculo. Por ello es importante realizar masajes de recuperación para evitar posibles lesiones.
Anatomía de los gemelos
Realmente son dos músculos que se sitúan en la parte posterior de la tibia, y junto con el sóleo forman lo que se denomima el tríceps sural. Estos tres músculos están unidos entre sí mediante el tendón de aquiles, que a su vez se une al hueso cálcaneo, situado en la parte posterior del pie.
La función principal de este grupo muscular es ayudar en la flexión de la rodilla y ayudarnos a caminar, correr o pedalear.
Automasaje de gemelos
El objetivo de cualquier masaje muscular es el de movilizar la musculatura aumentando el riego sanguíneo en la zona.
Aumentando el riego sanguíneo vamos a conseguir que la propia sangre de la musculatura se renueve. Esta renovación sanguínea va a drenar nuestra musculatura y va a expulsar diferentes sustancias nocivas para el músculo. Estas sustancias nocivas son las que pueden terminar causando contracturas, sobrecargas o rotura de fibras.
Para realizar nosotros mismos este tipo de masaje lo único que vamos a necesitar es un rollo de espuma (foam roller). Nos tendremos que sentar en el suelo y estiraremos la pierna que vamos a masajear.
Apoyaremos las manos en el suelo, nos elevaremos ligeramente y haremos rodar el rodillo de espuma por la pantorrilla.
Es recomendable realizar este tipo de masajes sobre todo después de los entrenamientos o pruebas deportivas. De este modo lograremos una recuperación muscular rápida y estaremos evitando posibles lesiones.
En el siguiente vídeo podemos ver un ejemplo práctica de cómo se realiza un masaje de este tipo.