Cómo reconocer si estamos ante una decisión a tomar

Javier y Max tienen más de cincuenta años y trabajan en una multinacional del sector sanitario desde hace más de veinte. Javier dirige el Departamento Comercial y Max el Departamento Postventa. En el post anterior Javier propone a Max analizar una decisión personal algo sorprendente: está pensando en abrir una Galería de Arte. La forma en que Javier ha comunicado el mensaje a Max sumerge a éste en un inconfundible compromiso. En este post explicamos cómo reconocer si estamos ante una decisión a tomar, incluso cuando nos creemos unos maestros en el arte de la Toma de Decisiones.
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Son las doce del mediodía de un jueves de Julio. Javier está sentado en su despacho y analiza las ventas de la primera quincena del mes en una hoja de cálculo. En la bandeja de entrada de su correo electrónico aparece un mensaje de Max:
Hola, Javier.En relación al tema que me comentaste, para poder situarnos y analizar qué es lo más adecuado, respóndeme a esto, por favor: ¿cómo te ves ahora y dentro de un año en el entorno profesional y en el entorno personal?. Escríbelo y me lo envias.
Observación: cuando escribo las palabras “antes” y “después” me refiero, por supuesto, al tema que me comentaste el sábado en el parque.Max
Al terminar de leer el mensaje Javier distrae la mirada del ordenador y ve a Oscar de pie en la puerta de su despacho. Oscar es uno de los Jefes Comerciales, tiene treinta y ocho años, y es pura sagacidad y empeño.

• Hola Javier ¿ tienes un minuto?
• Si, claro; pasa Oscar.
• Es para preguntarte acerca del concurso de respiradores del Hospital Santa Catalina; estoy cerrando los precios y tengo algo de lio.
• ¿Qué problema tenemos?
• Dudo de si la estrategia de los competidores puede dejarnos fuera del concurso.
• Prepara una tabla de pagos con la estrategia de ellos y la nuestra; la vemos por la tarde y te digo lo más conveniente. Cuando la hagas procura reflejar todas las jugadas posibles, ya me entiendes…. si ellos hacen esto nosotros hacemos aquello, etc. Ganar el concurso es importante, pero que aprendas por qué decides las cosas lo es más, y tú eres muy bueno, Oscar.
• Gracias jefe; lo preparo y te busco por la tarde.

A las dos de la tarde Javier se levanta, se coloca la chaqueta, y sale de su despacho con cara de pocos amigos. Al salir se dirige a la Secretaria del Departamento: “Manoli, me voy a comer; si hay algo, ya sabes, al móvil”.
Camina despacio porque está confundido; ¿qué quiere decir Max?; ambos estamos hartos de tomar decisiones y ahora me sale con esas preguntas. Solamente se trata de abrir una galería de arte y terminar con la monotonía de ser el número uno de los comerciales top. Pero si soy yo quien enseño a la gente a tomar decisiones.
Cuando te formules preguntas que alteran el curso continuo de tu pensamiento y quieras saber si estás ante una decisión a tomar:

1. Analiza si existe una diferencia entre la situación presente y las metas deseadas.
2. A continuación pregúntate si eres consciente del significado de esta diferencia.
3. ¿Te sientes con la motivación suficiente para eliminar esta diferencia?.
4. ¿Dispones de los recursos necesarios para eliminarla?.

SI ERES CAPAZ DE CONTESTAR A ESTAS CUATRO PREGUNTAS DATE LA ENHORABUENA PORQUE AHORA YA SABES SI TU PREGUNTA ES BANAL O, POR EL CONTRARIO, CONLLEVA UNA TOMA DE DECISIONES.
La aplicación práctica a este post es la siguiente: Javier está muy habituado a tomar decisiones pero esta vez ha enfocado la idea de la galería de arte con ingredientes únicamente emocionales; el mensaje de Max le recuerda que las buenas decisiones requieren análisis, estudio y reflexión.

Especialistas en Toma de Decisiones y Comunicación Persuasiva

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